Sin una vivienda, sin empleo, de luto y sin recursos necesarios para reconstruir sus hogares, las familias damnificadas de Jojutla pasarán las festividades en la tristeza.
Regeneración, 18 de diciembre de 2017.- Los damnificados que dejó el terremoto del pasado 19 de septiembre pasarán Navidad y Año Nuevo tristes, con frío y desamparados, pues viven casi a la intemperie, en tiendas de plástico.
Durante esta temporada, desean una vivienda para refugiarse del frío extremo por las noches y el calor intenso durante el día.
Casi se cumplen tres meses del terremoto que destruyó sus casas, y siguen esperando la ayuda del gobierno federal, del estatal, encabezado por perredista Graco Ramírez, y del ayuntamiento de Jojutla, a cargo del alcalde Alfonso Sotelo, así lo informa el diario .
Los damnificados se quejan de que están igual o peor que la tarde del 19 de septiembre, cuando el temblor con magnitud de 7.1 acabó con su patrimonio, de años, incluso décadas, de trabajo.
Aquellos que viven en casas de campaña tenían la esperanza de recibir más apoyo de ciudadanos y dependencias gubernamentales, lo que sólo ocurrió unas semanas.
SIGUEN SIN RECIBIR APOYO DEL FONDEN
Una parte de ellos aseguran que no han recibido apoyo alguno del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), pues la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) se equivocó en la entrega de tarjetas para repartir la ayuda y hasta el momento no han dado solución a ese error.
Los damnificados dicen que ya son muy pocas las personas que se acercan a damnificadosdejarles víveres para que se alimenten en las tiendas de campaña, donde viven como refugiados en sus propios lotes, donde tenían sus hogares.
Hay familias que están aún peor, ya que ni siquiera fueron inscritas en el censo del Fonden ni han recibido auxilio del fondo que creó el gobierno estatal, Unidos por Morelos.