Los esquemas de desvío de recursos de Javier Duarte y Rosario Robles tienen similitudes, y un empresario en común
Regeneración, 24 de septiembre de 2018.- Además de tener en común desvíos millonarios de recursos públicos, Javier Duarte y Rosario Robles también comparten a un empresario que a través de empresas fantasmas facilitó las operaciones, indica una investigación de MCCI y difundida por el periódico Reforma.
Actas de al menos cinco compañías por las que transitó el dinero saqueado de Sedatu entre 2016 y 2017 aparece como socio mayoritario o apoderado Alfonso Gómez Méndez, de Tuxtla Gutiérrez, quien a la vez funge como dueño de un despacho de servicios contables involucrado en el desvío de fondos del gobierno de Duarte.
Según datos recopilados y analizados por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), Alfonso Gómez Méndez, es el apoderado legal de una empresa llamada Agatha Líderes Especializados SA de CV, empresa fantasma a la que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), le entregó 164.7 millones de pesos, entre 2016 y 2017.
Esta empresa, tiene como apoderado a Alfonso Gómez Méndez, residente del Barrio Niño de Atocha de Tuxtla Gutiérrez, quien aparece como el socio mayoritario de Principal Enajena SA de CV, un despacho que fue reportado por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) por simular operaciones y ser parte del esquema de empresas a través de las cuales Javier Duarte desvió millones de pesos en recursos.
Vía Principal Enajena obtuvo contratos por asignación directa equivalentes a 9 millones 500 mil pesos durante el gobierno de Duarte, supuestamente para llevar a cabo servicios de comunicación y difusión, según el informe del Órgano de Fiscalización Superior del Estado de Veracruz, cuando hizo la revisión de contratos de publicidad. Los servicios jamás se otorgaron porque la empresa no cuenta ni con las instalaciones ni con la infraestructura.
Por otro lado, con Agatha Líderes Especializados, en septiembre de 2016, se obtuvieron diversos contratos por 50 millones 811 mil pesos para realizar supuestos servicios de difusión a través de las empresas Sistema Quintanarroense de Comunicación Social y por 83 millones 469 mil pesos de Televisora de Hemosillo SA de CV (Telemax).
Pero no sólo eso, el año siguiente, las dos intermediarias recibieron contratos por 30 millones de pesos. En conjunto, Agatha recibió 164.7 millones de pesos que repartió entre Telemax, 105.8 mdp, y el SQCS por 58,9 mdp.
El dinero obtenido de esta manera fue repartido en 10 empresas ligadas entre sí por apoderados legales y socios, en todos los casos se trata de empresas presuntamente fantasmas, pues los domicilios fiscales registrados son casas o locales solos, mienras los socios son en realidad vecinos humildes de barrios populares de chiapas.