El riesgo de adquirir diversas enfermedades se incrementa a medida que los hábitos alimentarios cambian de lo natural a lo procesado.
Los alimentos procesados contienen cantidades elevadas de azúcar, sal y grasas.
De este último ingrediente hay cuatro tipos: grasa saturada, monoinsaturada, poliinsaturada, colesterol y grasas trans.
En este espacio hablaremos de los ácidos grasos trans, mejor conocidos como “grasas trans”.
Regeneración 22 de marzo 1014.-Las grasas trans son grasas vegetales que cambian su textura líquida por una textura sólida a través de un proceso químico llamado hidrogenación.
La industria saca el mayor provecho de este componente, pues mejora la durabilidad, el sabor y la textura de los alimentos para que tengan mayor vida de anaquel y los consumidores prefieran sus productos.
Si bien ofrecen ventajas a la industria de alimentos, las grasas trans tienen efectos negativos para la salud, por ejemplo:
- Incrementan los niveles del “colesterol malo” y reducen los niveles del “colesterol bueno”.
- Aumentan el riesgo de padecer enfermedades del corazón.
- Contribuyen a la inflamación y bloqueo de las arterias, lo cual conduce a ataques al corazón.
Se ha establecido que una reducción de apenas un 2 a 4% en el consumo de grasas trans en América Latina y el Caribe podría prevenir entre 50 mil y 230 mil infartos al corazón al año.
El grupo de expertos de la OMS/FAO recomendó que el consumo de grasas trans no supere el 1% del aporte energético alimentario diario.
Si una persona lleva una dieta de 2 mil calorías por día no debe superar el consumo de 2.2 gramos de grasa trans al día.
Actúa: Recuerda leer la etiqueta de los productos que consumes y evitar el consumo de alimentos procesados que contengan grasas tans, como: galletas, pasteles y pan dulce industrializado; margarinas; pizza congelada; palomitas de microondas; papas fritas industrializadas y cremas para el café.
Información: Alianza salud