Marilú Esponda, la primera mujer en Comunicación Social de la Arquidiócesis

Regeneración platicó con la comunicóloga egresada de la Universidad Panamericana y colaboradora de varios medios de comunicación sobre el reto que significa ser la primera mujer al frente del Semanario católico de información y formación «Desde la Fe».

Con la llegada del Cardenal Carlos Aguiar Retes a la Arquidiócesis de México se abre una nueva era de la Iglesia Católica y con ella la apertura para que las mujeres participen de una manera más protagónica en sus objetivos. Es el caso de Marilú Esponda, quien dirigirá el departamento de Comunicación Social.

Regeneración: ¿Qué significa ser la primera mujer que dirige la comunicación de la Arquidiócesis?

Esponda: Este encargo representa un gran desafío tanto personal como profesionalmente. Que sea mujer tiene muchas consecuencias a la hora de comunicar; para mí, lo importante son siempre las personas. Este nombramiento puede inspirar a tantas mujeres competentes, que a veces no se les reconoce su valía en el ámbito profesional. El papel de la mujer en la Iglesia y en el mundo es el más importante para construir un mundo en paz.

Regeneración: La diversificación de las creencias y los escándalos que han bombardeado a la Iglesia Católica, no sólo en México sino en el mundo, convierte un reto en comunicar la intención católica, ¿cuál es la estrategia que emprenderás para comunicar el trabajo religioso y social de la institución eclesiástica?

Esponda: Una sociedad plural y democrática como la nuestra necesita contar con voces claras, serenas y firmes, que sepan presentar su identidad de manera respetuosa y constructiva. La Iglesia católica tiene un papel importante que cumplir en nuestra sociedad mexicana. La clave de la buena comunicación de la Iglesia es la credibilidad, que aumenta cuando los cristianos reflejamos el Evangelio en nuestras vidas, y disminuye con los escándalos y la falta de coherencia personal.

El verdadero reto de la Iglesia es que los católicos verdaderamente lo seamos, porque luchamos por serlo. La estrategia será desde dentro hacia afuera. El reto es formar en convicciones a su propia gente y es un reto también secundar esto desde la oficina de comunicación.

Regeneración: El departamento de comunicación de cualquier institución es ojos y oídos hacia el exterior, ¿cuál será la importancia y qué nueva cara tendrá la Arquidiócesis con la sociedad mexicana y el mundo?

Esponda: La oficina de comunicación de la Arquidiócesis se propone escuchar mucho, para poder servir a su misión. Pero también es la lengua para transmitir de manera objetiva el ser y el hacer de la Iglesia en la capital del país. El Papa Francisco ha planteado la comunicación de la Iglesia poniendo el énfasis en volver a lo esencial del mensaje cristiano, ver a Dios en los demás, en hechos concretos de servicio hacia los que lo necesitan. En la Arquidiócesis seguiremos ese enfoque que está poniendo sobre la mesa el Papa Francisco.

Regeneración: Conoces el trabajo del cardenal Carlos Aguiar Retes, Arzobispo Primado de México, has trabajado con él, ¿qué cambia con esta nueva encomienda?

Esponda: Sí, trabajé con él hace muchos años, cuando él era el Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, y me confió la oficina de prensa.

De Don Carlos destacaría que es una persona sumamente cercana, que se preocupa mucho por cada persona que tiene a su alrededor, y por eso, con un puesto con tanta trascendencia, será capaz de ayudar e iluminar a muchísima gente.

Al ser notificado del caso de un sacerdote que se le detuvo por presuntos comportamientos de abuso sexual…don Carlos quiere llegar al fondo de los problemas, con decisión, transparencia y cercanía a las víctimas.

Regeneración: ¿Cuál crees que es tu misión en esta nueva etapa de tu vida y profesional?

Esponda: Creo que un comunicador también tiende puentes que facilitan las relaciones. Los buenos comunicadores institucionales son transparentes como un cristal, porque los protagonistas son la gente. Si hago bien mi trabajo, no se notará que estoy. Veo mi misión como contribuir a que se viva mejor la identidad, que los católicos vivan como tales y que los medios puedan informar de manera muy profesional. Quiero contribuir con mi trabajo para que cambie lo que hay que cambiar; lograr que la Iglesia sea cada vez más lo que está llamada a ser: luz para la gente, alimento para el camino de la vida, motivo de esperanza ante las dificultades, verdad que aporta sentido.

Regeneración: Indudablemente será otra Arquidiócesis, ¿cuáles serán sus nuevos objetivos y cómo ayudarás, junto con tu equipo, a consolidarlos?

Esponda: La meta de Don Carlos es lograr una fuerte unidad dentro de la Iglesia y fuera de ella, porque a nuestro país le hace falta vivir en armonía, en continua preocupación de los unos por los otros. Le interesa mucho trabajar para que los católicos logremos transformar la Ciudad de México en una comunidad fraterna y solidaria. Y a esto le ayudaremos todo el equipo de comunicación.

Para finalizar, la también maestra en Administración de empresas en la IPADE Busines School y corresponsal para algunos medios de comunicación nos compartió que fue educada en el seno de una familia católica y por ello comprendió que el mensaje de la Iglesia es liberador, porque es un gran “sí” a todo lo bueno del ser humano.

Declaró ser una mujer muy afortunada, pues se considera una persona muy feliz y vivir su fe desde el espíritu del Opus Dei.

«Vivimos en una época convulsa y en gran medida, beligerante, pero veo el futuro con esperanza, estoy segura que los jóvenes quieren empeñar su vida en cosas que valen la pena, que tienen sentido, no se conforman con sucedáneos baratos que dan mucho placer o que prometen satisfacciones aisladas que no llenan el alma».