Una enfermera exempleada del Centro de Detención de Irwin reveló que se practicaba histerectomías a las mujeres migrantes detenidas de una manera masiva
Regeneración, 17 de septiembre, 2020. La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México informó que pidió formalmente información a Estados Unidos sobre las denuncias recientes de presuntas esterilizaciones masivas de mujeres migrantes en centros de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en Irwin, Georgia y El Paso, Texas.
De acuerdo con la enfermera Dawn Wooten hay una alta tasa de mujeres sometidas a histerectomías (cirugía en la que se retira el útero) en un centro operado por privados en Irwin.
Esterilización forzada en centros de detención de migrantes en EU
Además Wooten denunció que una migrante fue agredida sexualmente en otras instalaciones en El Paso, Texas.
La SRE informó a través de un comunicado que México «ha solicitado formalmente a las autoridades correspondientes un informe sobre las supuestas prácticas negligentes o violatorias de derechos en centros de detención migratoria (…) a fin de esclarecer las posibles afectaciones a ciudadanas mexicanas, así como información sobre los procedimientos realizados y la justificación correspondiente».
El pasado lunes 14, varias organizaciones en defensa de los derechos de los migrantes emitieron una queja a altos cargos del Departamento de Seguridad Nacional y al ICE.
La queja se hizo basada en el testimonio de la enfermera exempleada del Centro de Detención de Irwin y fue firmada por las organizaciones Project South, Georgia Detention Watch, Georgia Latino Alliance for Human Rights y South Georgia Immigrant Support Network.
En el centro de detención no sólo se ignoraban los protocolos contra el covid-19, sino que se realizaban procedimientos quirúrgicos de una manera injustificada.
El texto de la queja indica que el personal médico del mencionado centro de detención practicó histerectomías a mujeres que informaban tener ciclos menstruales abundantes u otros dolores más graves.
Para ello, de acuerdo con Wooten, se recurría constantemente a un ginecólogo de fuera de las instalaciones que casi siempre optaba por extirpar todo o parte del útero en las pacientes detenidas.
«Todo el mundo que ve tiene una histerectomía, casi todo el mundo», afirma la enfermera, que recuerda un caso en el que «se le quitó el ovario equivocado a una joven». «Se suponía que debían extirparle el ovario izquierdo porque tenía un quiste ahí, pero él le sacó el derecho». Ella estaba enojada. Tuvo que volver para extirparse el izquierdo y terminó con una histerectomía total», añadió.