Juchitán de Zaragoza, el municipio oaxaqueño más golpeado por el sismo del pasado 7 de septiembre, no recibe los apoyos necesarios del gobierno federal, ni estatal; denunció la presidenta municipal, Gloria Sánchez.
Regeneración, 15 de septiembre de 2017.- En entrevista telefónica con Ciro Gómez Leyva, esta mañana la presidenta municipal Gloria Sánchez dijo que ante la situación en la que esta Juchitán, que está de luto por las muertes que causó el sismo, debido a esto no se festejará el 15 y 16 de septiembre, “aunque tampoco se puede dejar pasar sin hacer nada, vamos a hacer un acto cívico en la plaza Hidalgo en la mañana, ofrenda floral”.
Agregó que ahora Juchitán se encuentra en una situación triste, impotente, por la desgracia ocurrida y «yo entiendo a toda la gente del municipio que lo que quiere una atención directa, inmediata, en el momento para poder salir al paso de sus grandes necesidades; sin embargo, estamos seguros de que Juchitán tendrá que salir adelante y de esto depende del gobierno federal, como municipio no tenemos la capacidad ni estamos preparados para afrontar esta gran problemática».
También dijo que siguen con el censo, en el que ya han avanzado un 50 por ciento, unas 5 mil 400 viviendas censadas, “pero aún falta”, dijo.
Resaltó que no han recibido ni un peso del gobierno federal ni estatal para adquirir despensas, «nosotros hemos decidido con los recursos propios del Ayuntamiento poder adquirir de entrada vamos a adquirir 10 mil despensas, que es aproximadamente un millón y medio de pesos, para poder distribuir casa por casa y este trabajo ya inició hace tres días».
La presidenta municipal reconoció que el municipio, de unos 100,000 habitantes, no tiene «recursos para enfrentar este problema», que ha dejado 98 muertos a nivel nacional, 36 solo en Juchitán, pese a que el balance es todavía preliminar.
El gobierno municipal de Juchitán ha estado repartiendo estos días agua y comida, y han podido conseguir algunos recursos, pero no en la cantidad requerida.
«Nos falta todo, nos faltan víveres y nos falta agua. Atenciones en los campamentos de los vecinos. Toldos, sombras y casas de campaña», aseveró.
Desde el temblor de 8.2 grados en la escala de Richter, miles de personas duermen en las calles y plazas del municipio tras la destrucción parcial o total de sus viviendas.
Con información de: Radio Fórmula y Expansión