Luego de que las tres escuelas de la comunidad indígena de Ocuilan, Estado de México cayeran por el terremoto, los pobladores pusieron manos a la obra.
Regeneración, 05 de octubre de 2017.– Luego de que el sismo del 19 de septiembre acabara con las tres escuelas de una comunidad en el Estado de México, los pobladores ni siquiera esperaron al gobierno y empezaron la construcción de unas aulas provisionales para que sigan las clases.
Padres de familia, maestros y alumnos del jardín de niños, la primaria y la telesecundaria de la comunidad indígena de Santa Lucía, en Ocuilan, Estado de México, decidieron construir una escuela con los recursos naturales que tienen a la mano: los árboles del Bosque de Agua.
Los habitantes, hicieron unas cabañas improvisas para los niños que tienen que estudiar ahí, mismas que fueron construidas con madera aprobada por instancias gubernamentales.
Sobre las escuelas, la primaria Miguel Hidalgo, la telesecundaria José María Velasco y el kinder bilingüe, no se sabe si van a reconstruirlas o si hay proyecto para ellos.
Apenas dos días después del terremoto los pobladores se reunieron en asamblea y ahí decidieron poner manos a la obra. Los leñadores se ofrecieron a conseguir madera para construir las aulas, otros pobladores pusieron a disposición de la comunidad sus camionetas, herramienta y su mano de obra para levantar el plantel en la cancha de futbol de Santa Lucía
Vía Bajo Palabra.