Una feminista dijo que las mujeres luchamos cuando algo nos duele, o cuando algo nos apasiona.
Por Ana E. Contreras.
Concuerdo con ella. Luchamos porque nos duele México, porque vivimos su agonía y su impunidad. Porque la indiferencia de algunos mexicanos también nos duele y molesta enormemente, pero comprendemos que esa indiferencia es el resultado de un sistemático trabajo de manipulación mediática de años, y en todos los niveles posibles. Sabemos que debemos romper esa inercia para poder avanzar en el cambio que tanto necesitamos para liberar a México.
Es el momento de ser creativas y sistemáticas; ahora nos toca a nosotras crear esas nuevas estrategias que forzosamente tendrán su fundamento en la educación, en la formación de cuadros, en el trabajo con enfoque de género, en la sensibilización de nuestro entorno, en el trabajo diario y el compromiso integral desde adentro hacia afuera.
Luchamos porque ser de «izquierda», ser «progre», no es una «moda». Esto se respira, se piensa, se siente, se planea, se analiza, se disfruta, se ama… se vive, y eso apasiona.
Sin duda hay momentos en que pareciera que se predica en desierto, se siente que se avanza lento y que cada paso que se da, pesa toneladas; pero ¿quién dijo que las luchas son instantáneas? Revolución que valga la pena merece planificación, dedicación y tiempo de maduración.
Queda claro que las mujeres tenemos la chispa que sirve para prender la mecha de una Revolución de conciencias y conseguir un cambio social a través de MORENA.
Luchamos porque vemos vestigios hermosos de vida, color, cultura, fuerza, inteligencia y mucho poder en el pueblo de México. Porque la idea de sembrar libertad llena el corazón de satisfacción, porque sus frutos tarde o temprano serán cosechados ¡y eso apasiona!
Foto: faktorialila.com / El patriarcado: «Tú no lo ves, pero te toca. ¿Cuándo empezamos a desmantelarlo?»