Proxima rifa del Gobierno de México: Un beneficio directo para Sinaloa

Se podrían rifar 5 mil 500 terrenos de playa en Escuinapa que formaron parte de un proyecto turístico fantasma, durante la gestión de Felipe Calderón.

Regeneración, 22 de octubre de 2020. En el marco del evento “México con agua se transforma”, el presidente mencionó: “Vamos a ver qué hacemos con ese terreno porque son bienes del pueblo, es dinero de los mexicanos, queremos darle uso en beneficio de Sinaloa. De ese desarrollo, todo lo que se obtenga… será en beneficio de Sinaloa. Les van a quedar aquí esos recursos, vamos a ver qué es lo que conviene más, si es terminarlo con una promoción del gobierno y la iniciativa privada o subastarlo-”, propuso.

Y es que durante la gestión de Calderón Hinojosa se aseguró que la región sería “el segundo Cancún”, pues habría 5 mil 500 viviendas, 118 hectáreas de campos de golf, 44 mil habitaciones de hotel, en un total de 2 mil 381 hectáreas.

El proyecto fantasma

Estaban presupuestados 7 mil millones de pesos de inversión, la creación de 150 mil empleos y 3 mil millones de pesos de derrama económica que beneficiarían directamente a Escuinapa y Teacapán, comunidades que se quedaron esperando los beneficios prometidos y siguen sufriendo los estragos que dejó a su paso el Huracán Willa en el año 2018.

Hoy, 11 años después de haber iniciado este proyecto, en la zona no hay electricidad u otros servicios; hay escasez de agua potable y el subsuelo dificulta la cimentación de hoteles, además del probable riesgo de inundaciones.

Inversión a la urbanización de Mazatlán

«Se puede desarrollar turísticamente más Mazatlán, que es bellísimo… ese terreno está allá refundido dónde no hay aeropuerto”, mencionó López Obrador, quien ha decidido frenar la inversión en el proyecto de Playa Espíritu y rifar los lotes que estaban contemplados para el proyecto de vivienda.

Se gastaron 4 mil 700 millones de pesos de recursos federales para el desarrollo que no ha entrado en operación y que no ha sido atractivo para la iniciativa privada.

El predio

Era un rancho propiedad del ex gobernador Antonio Toledo Corro comprado por 100 millones de dólares, precio muy elevado de acuerdo con la valuación de la zona. La compra se hizo por parte de FONATUR, la cual el presidente calificó como «buena para los privados y mala para la Hacienda pública».

Marsol Quiñónez Castro