A pesar de que el tricolor llevó a la gobernatura de Chihuahua a César Duarte, ante su detención se desmarcó de su miembro y lamentó que priistas se vean envueltos en temas de corrupción.
Regeneración, 8 de julio del 2020.La detención del ex gobernador priista de Chihuahua, César Duarte Jáques, ha generado diversas reacciones en la política nacional.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), mismo que lo encumbro y llevo a la gobernatura de Chihuahua, dio a conocer a través de un comunicado que la corrupción es una “perversión que no se debe de tolerar”.
Sin mencionarlo por su nombre, el tricolor indicó que lamenta que priistas se vean involucrados en temas de corrupción. Y que, al hacerlo, estos han traicionado al gobierno, a las instituciones y a su partido.
De esta forma el partido se desmarca de su miembro y señalan que no estarán con quienes abusan su posición en la función pública para obtener provechos personales. Y señalan que son las personas quienes delinquen, no las instituciones.
Por su parte, el actual gobernador de Chihuahua, Javier Corral, agradeció al presidente López Obrador por la detención del ex gobernador.
Así mismo, el titular del ejecutivo estatal felicitó al fiscal, Alejandro Gertz Manero y al canciller, Marcelo Ebrard, por haber hecho cumplir la ley y haber solicitado la detención de quien llamo “prófugo de la justicia”.
Además, señaló que Duarte Jáquez fue protegido por la pasada administración federal a cargo de Enrique Peña Nieto. Esto a pesar de que el ex gobernador dejó al estado de Chihuahua con una deuda cercana a los 50 mil millones de pesos.
Pues indicó que Duarte Jáquez tejió una red de corrupción con diferentes actores políticos y empresariales lo que le brindo impunidad.