Con 214 votos a favor, 47 en contra y una abstención, el Senado español aprobó la entrada en vigor del artículo 155 de la Constitución española, con el que se da autorización a Mariano Rajoy, para destituir al gobierno de Puigdemont, intervenir y controlar el Parlamento catalán.
Regeneración, 27 octubre 2017.- Con 214 votos a favor, 47 en contra y una abstención, el Senado español aprobó la entrada en vigor del artículo 155 de la Constitución española, con el que se da autorización al Ejecutivo, del derechista Mariano Rajoy, para destituir al gobierno catalán al completo, intervenir y controlar el Parlamento catalán y convocar elecciones en un plazo máximo de seis meses.
El presidente Rajoy defendió la iniciativa bajo el argumento de que se trata de una medida “excepcional” en una situación de “excepción”, que resumió en que un gobierno autonómico se ha “saltado la legalidad que nos dimos en la Constitución de 1978” y ha votado por suprimir la soberanía de “todos los españoles” con una declaración unilateral de secesión.
La medida se aplicará de manera “gradual”, pero su intención es contrarrestar la declaración unilateral aprobada en el Parlamento catalán una hora antes, en la que se decidió no reconocer más la legalidad del Estado español y asumir como único manto jurídico para sus iniciativas la aprobada en el pleno del pasado 6 y 7 de septiembre, en la llamada “ley de transitoriedad” o de “desconexión”.
El Gobierno destituirá a Carles Puigdemont esta misma tarde. Mariano Rajoy ha convocado un Consejo de Ministros ordinario y otro extraordinario este viernes tras la proclamación de la independencia por parte del Parlament y la aprobación del artículo 155 de la Constitución en el Senado.
Rajoy tendrá ahora que aprobar en un Consejo de Ministros que se llevará a cabo esta misma tarde las iniciativas concretas para la entrada en vigor de la propuesta, una vez que ya cuenta con el respaldo de la mayoría del Senado.
Rajoy contó con el apoyo de los senadores de su partido, el Partido Popular (PP), pero también del principal partido de la oposición, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y de Ciudadanos. Mientras que los senadores del bloque nacionalista catalán y vasco y de Unidos Podemos votaron en contra.
La aprobación de este precepto constitucional no supone su puesta en marcha sino que solo autoriza al Gobierno a utilizarlo, tras ratificarlo esta tarde el Consejo de Ministros. El fin del trámite en el Senado, que ha durado seis días, ha cerrado unos días vertiginosos en los que el Gobierno y la Generalitat han estado tratando de alcanzar un acuerdo para descongestionar una de las situaciones más complicadas, junto al 23-F, que ha vivido España desde la instauración de la democracia tras la muerte del dictador Francisco Franco.
La medida, apoyada por el Partido Popular (con sus coaligados Foro Asturias y Unión del Pueblo Navarro), el PSOE, Ciudadanos y Coalición Canaria, supone el cese del presidente de la Generalitat y su Gobierno, la restricción de los poderes del Parlamento catalán, la intervención de organismos y servicios de la comunidad autónoma, como los Mossos d’Esquadra, y la convocatoria de elecciones en una plazo de seis meses. Fue tras una sesión densa, a menudo bronca y cargada de inquietud por el transcurso del pleno del Parlament catalán. Se han opuesto al 155 Unidos Podemos y sus confluencias, Esquerra Republicana de Catalunya, Partido Nacionalista Vasco y el PDeCAT.
Con información de El Español, La Jornada y Agencias