Sotheby’s busca subastar colección «Sol de Noche» formada por 57 piezas de las cuales 35 son bienes culturales históricos y 22 de reciente manufactura
Regeneración, 30 de octubre del 2019– Sotheby’s subasta nuevamente piezas precolombinas mexicanas correspondientes a las culturas olmecas, mayas, zapotecas, mexicas y teotihuacanas. Autoridades mexicanas buscan evitar subasta.
La oferta
«Las 74 piezas de su propiedad arrojan nueva luz sobre las culturas más ilustres del mundo precolombino», señala Sothebys en su catálogo.
Dice que se trata, por ejemplo de «cuatro máscaras de piedra teotihuacana ofrecen reflejos sublimes de los diversos matices de estos rostros idealizados».
Los finos objetos de jade verde – añade- son «de las épocas olmeca y maya encarnan la mazorca de maíz que sostiene la vida».
Evitar la subasta
En los medios de comunicación trascendió que autoridades mexicanas buscan evitar dicha subasta.
Por ello desde principios de este mes han desarrollado diversas acciones como dictámenes y solicitudes para evitar la subasta en Sotheby’s.
El periódico La Jornada refiere que el Instituto Nacional de Antropología realizó un estudio de las piezas arqueológicas.
En dicha investigación se concluye que de las 57 piezas que se anuncian de procedencia mexicana, 35 de ellas efectivamente forman parte de nuestro patrimonio.
Otras 22 piezas serían de reciente manufacturación por lo cual no forman parte de nuestro patrimonio histórico.
Debido a la falta de rastros documentales, no hay realmente forma de saber de dónde son y cuándo fueron excavadas, así como cuándo, cómo y en qué circunstancias salieron de México.
Un reclamo sobre bienes culturales como el interpuesto por México ante Francia y la casa de subastas Millón se debilita enormemente si no se cuenta con la procedencia de los bienes.
El arqueólogo Salinas Córdova, considera que los datos de procedencia de los objetos proporcionados por Sotheby’s son incompletos y grises.
Al respecto, su colega sueca Paloma Berggren opinó:
‘‘Uno de los aspectos más problemáticos de estas casas de subastas es que legitiman la violencia, el saqueo y el abuso de poder mediante la venta, evaluación y licitación de artículos arqueológicos».
«Esto es parte de la llamada cultura global del tráfico”.