Regeneración, 15 de junio de 2015. San Felipe Tepatlán, Puebla.- Habitantes del municipio de San Felipe Tepatlán solicitaron al alcalde Ramón Dávila Santos que revoque el permiso de uso de suelo, de construcción y de movimiento de tierra otorgado a la empresa Deselec-Comexhidro para la construcción de la hidroeléctrica Puebla 1 en las aguas del río Ajajalpan e impida su uso con fines de lucro.
Para que no quede duda y como las palabras se las lleva el viento, tras una asamblea realizada este domingo en la cancha del poblado ubicado en la entraña septentrional de la entidad, cientos de totonakus firmaron el acta en la que manifestaron su oposición a la instalación de la generadora de energía y también solicitaron que el Ayuntamiento tome las medidas necesarias para hacer respetar “la decisión del pueblo” y se convoque a una sesión pública de Cabildo.
Es en terrenos de este pequeño municipio de sólo 37 kilómetros cuadrados de superficie asentando en el declive del Golfo de México, atravesado por los caudalosos Ajajalpan e Ixcanaquihui, que tienen una gran cantidad de caídas, que los empresarios quieren construir la presa y la cortina de la hidroeléctrica.
Por ello, los pobladores pidieron además que no se autoricen en el municipio proyectos mineros, hidroeléctricos, de extracción de hidrocarburos “o cualquier otro que ponga en riesgo nuestros derechos como pueblo indígena, como el derecho al agua, al medio ambiente sano, a la autodeterminación, al territorio. Todos ellos contemplados en la Constitución y los convenios internacionales”
Los opositores a la hidroeléctrica indicaron que en la sesión del órgano de gobierno municipal debe aprobarse un punto en el que los regidores acuerden no autorizar “el uso de suelo, el cambio de uso de suelo, de construcción, de movimiento de tierras, para la realización de ningún proyecto de generación de energía hidroeléctrica en el municipio, de exploración o explotación de hidrocarburos y se impida el uso, aprovechamiento o explotación de agua a ninguna empresa privada o individuo que quiera lucrar con la misma”.
Antes, los indígenas originarios de Ática, La Guadalupana, Pacho, África, Osorno, Xochimilco, San Miguel Jojopango, San Martín, Bienvenido, San Mateo, entre otros, hablaron de las consecuencias adversas que tendrá para ellos la construcción de este proyecto y la manera en que los empresarios, “que sólo piensan en el dinero, se los quieren imponer, incluso “simulando una consulta”.
Varios de ellos denunciaron que en días pasados, a base de engaños, funcionarios de Deselec-Comexhidro los citaron en este mismo lugar y querían que firmaran algunos documentos sin que les dieran a conocer su contenido.
“Primero, la gente que han comprado, nos fue a invitar casa por casa, a que viniéramos a una consulta. No nos dijeron que según ellos era la última, pero nos enteramos por otro lado. Así que decidimos venir a defender nuestros derechos y nuestro río. Llegamos y ya tenían todos sus aparatos y tenían sus mesas para que pasáramos a firmar. Querían que firmáramos antes de cualquier cosa. Les exigimos información, pero también les dijimos que no íbamos a firmar. Que no queremos la hidroeléctrica”, dijo Andrea Esteban.
En esa misma ocasión, los pobladores insistieron a la empresa que les informará en qué les afectará la hidroeléctrica. “Pero ellos nos dijeron que no nos va a afectar nada. No se preocupen. El río quedará igual, pero nosotros sabemos que las cosas no serán igual. Es como si apretamos el puño de nuestra mano, la sangre que corre por nuestras venas, no pasará igual. Eso le sucederá al río. Lo van a tapar y muchos pueblos quedarán sin agua. Los empresarios no piensan en las personas. Ellos piensan siempre en el dinero y no queremos que nuestros hijos nos reclamen. Nadie puede comerciar con el agua, esa nos la da Dios, igual el aire”, aseguró Manuel Hernández.
Los empresarios, agregaron otros pobladores, llegaron aquí hace tres años y todo lo han hecho a “escondidas”. Se reunieron “con dos o tres en sus casas, luego llegaron a ofrecer dinero, escrituras, proyectos productivos para engañar a la gente y comprarla. Pero les hemos dicho que no queremos su proyecto, pero como ellos se hacen que no entienden, hoy venimos a decirles que no y hasta se los firmamos”.
Los tepatlanenses que constituyeron el Comité de Defensa del Río Ajajalpan, recibieron la solidaridad de pobladores de Olintla, de Cuetzalan, de Hermenegildo Galeana y de miembros de organizaciones sociales como el Consejo de la Tierra y de investigadores y académicos de Fundar, pero también la de los habitantes de San Mateo Tlacotepec, en Ahuacatlán que igual que ellos han rechazado este proyecto..
La hidroeléctrica Puebla 1, sería construida en las aguas del río Ajajalpan por la empresa Deselec-Comexhidro e involucra a los municipios poblanos de Ahuacatlán, San Felipe Tepatlán, Jopala, Tlapacoya y Chiconcuautla; así como de Mecatlán, Filomeno Mata, Coyutla y El Espinal en Veracruz.