El primer ministro conservador de Japón, Shinzo Abe, arrasó en las elecciones legislativas anticipadas y revalidó su supermayoría de dos tercios en la Cámara Baja. Un resultado que le permitirá acometer su ansiada reforma de la Constitución pacifista de 1947.
Regeneración, 23 octubre 2017.- El primer ministro conservador de Japón, Shinzo Abe, arrasó en las elecciones legislativas anticipadas y revalidó su supermayoría de dos tercios en la Cámara Baja. Un resultado que le permitirá acometer su ansiada reforma de la Constitución pacifista de 1947, así como proseguir su plan de reformas para relanzar la economía nipona.
Los partidos que favorecen enmendar la Constitución ganaron casi el 80% de los escaños en la votación de la Cámara baja del domingo, mostraron recuentos de medios. Aún quedan cuatro asientos por decidir y las cifras finales se darán a conocer este lunes.
Eso dejó al pequeño y nuevo Partido Constitucional Democrático de Japón (PCDJ) como el mayor grupo opuesto a los cambios que propone Abe.
El Partido Liberal Democrático de Abe y un pequeño socio de coalición se aseguraron al menos 313 escaños de los 465 de la cámara baja, superando la barrera de los 310 diputados que dan una mayoría de dos tercios. Todavía quedan tres puestos por conceder.
Abe dijo que quería sumar a su causa a otros partidos, incluido el nuevo Partido de la Esperanza de la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, y que no insistirá en la meta de cambiar la Constitución para el 2020 que planteó a comienzos de este año.
«Primero, quiero profundizar en el debate y lograr que la mayor cantidad de personas estén de acuerdo en esto», dijo el primer ministro a una emisora local a última hora del domingo. «Deberíamos hacer de ello una prioridad», añadió.
Enmendar el artículo 9 de la Constitución pacifista del país sería enormemente simbólico para Japón. Sus partidarios lo ven como la base de la democracia de la posguerra, pero muchos conservadores lo ven como una imposición humillante después de la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial.
También sería una victoria para Abe, cuya agenda conservadora que apunta a restaurar los valores tradicionales, enfatizando las obligaciones del Estado sobre los derechos individuales, se centra en revisar la Constitución.
Las enmiendas constitucionales en Japón requieren el apoyo de una mayoría de dos tercios en cada cámara del Parlamento y luego ser legitimizadas por una mayoría en un referendo público, sin quórum mínimo.
El líder de Japón prometió este lunes que abordará lo que calificó como sus dos crisis nacionales: la amenaza nuclear de Corea del Norte y el envejecimiento y disminución de su población.
El primer ministro, Shinzo Abe, dijo en una conferencia de prensa que está comprometido con la protección de la prosperidad del pueblo japonés y la paz ante cualquier contingencia. Además se refirió a los ciudadanos nipones que fueron secuestrados hace años y que se cree siguen retenidos en Corea del Norte.
El líder señaló que trabajará junto a Estados Unidos, China y Rusia para lidiar con Pyongyang y que usará una diplomacia fuerte y resuelta para enfrentar la amenaza que representa Corea del Norte.
“Impulsaré una diplomacia decisiva y fuerte para bordar los problemas de misiles, nucleares y secuestros de Corea del Norte y ejercer más presión para que cambie su política”, señaló.
Según Abe, la disminución de la población y su envejecimiento es “el mayor reto” para sus políticas económicas, conocidas popularmente como “Abenomics”, que buscan recuperar al país de la deflación. “El problema está avanzando por minutos, y no podemos permitirnos esperar más”.
El mandatario prometió para final de año un amplio paquete para abordar los desafíos demográficos del país, incluyendo inversiones en educación, mejoras en productividad y una reforma del sistema de pensiones.
Con información de Reuters y AP