Activistas de Morelos acusaron al gobernador de la entidad, Graco Ramírez de utilizar el aparato estatal para ir contra el rector de la UAEM.
Regeneración, 12 de noviembre de 2017.- En medio de la crisis financiera y política en la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, activistas y políticos consideraron que la orden de aprehensión contra el rector, Alejandro Vera, es una forma de venganza política de parte de Graco Ramírez.
Según los defensores de Vera, la orden de aprehensión pretende enviar un mensaje contra quienes se oponen o critican la conducción del gobierno local, que por cierto, ha retenido dinero de la Universidad, lo que desencadenó una huelga.
«Esto es una venganza. El Fiscal Anticorrupción es un hombre ruin que se presta a las bajezas que un profesional del derecho no haría. Es el brazo ejecutor de las venganzas políticas de Graco. En Morelos no hay división de poderes, el que manda es Graco y en lugar de justicia hay consigna en contra de todos los que no coinciden con él», acusó el senador de Morena Fidel Demédicis.
«Este es un claro ejemplo de administración de venganza, es una señal muy grave de descomposición en el Estado», sostuvo Emilio Álvarez Icaza, ex secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Ambos personajes consideraron que en este caso, lo que Vera debía hacer es conseguir un amparo federal, solicitud que ya llevó a cabo.
Demédicis adelantó que el próximo martes se reunirá con el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, para tratar el caso del Rector y adelantó que presentará un punto de acuerdo en el Senado sobre el tema.
Informó que desde este domingo y mañana lunes podrían registrarse movilizaciones ciudadanas para respaldar a Vera y condenar la actuación del Gobierno estatal.
Álvarez Icaza urgió la intervención del Senado para llamar a cuentas al Gobernador, con la finalidad de que deje de actuar al margen de la ley.
Sobre el tema también opinó el senador de Morena, Rabindranath Salazar, quien calificó de excesivo el operativo ordenado para la aprehensión del Rector.
«Es un uso excesivo del poder, no lo hacen así ni cuando se trata de un delincuente peligroso. Se nota que hay una persecución contra Vera y aunque estamos a favor de la fiscalización, esto pareciera más bien una reacción violenta a las denuncias que se hicieron el pasado jueves desde el Senado», dijo.
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