El Senado le otorgó 4 mil 500 euros, unos 100 mil pesos, para pagar viáticos, pero la mitad de estos no se comprobaron.
Regeneración, 29 de agosto de 2018. Arturo Garita Alonso, el secretario General de Servicios Parlamentarios del Senado de la República,hizo dos viajes a Europa entre 2015 y 2016 por cuestiones de trabajo, pero se llevó a toda su familia por diez días a Italia y Francia, los viáticos corrieron por cuenta del Senado.
Para dicho viaje se le autorizaron cuatro mil 500 euros, aproximadamente 100 mil pesos, para gastos de hospedaje, transporte y alimentos; la mitad de estos recursos no se comprobaron, detalla una investigación del noticiero En Punto.
“Tuve la encomienda de la mesa directiva de acudir al Parlamento Europeo para ver algunas practicas que ellos implementase (sic) sobre el trabajo del pleno y sobre las comisiones en particular”, detalló Garita.
Garita Alonso argumentó que viajó acompañado de su esposa debido a una serie de problemas cardíacos que padece y que, además, sus hijas son menores de edad.
“En un cuarto buscamos una tarifa económica y ahí nos amontonamos, a veces hay lugares donde dormíamos los cuatro en una cama […] Podría parecer un viaje familiar pero reitero, solamente el senado me asigna un solo boleto, los comprobantes están a la vista y se ajusta uno siempre al tabulador que dice la institución”, dijo Garita Alonso.
En 2016, el funcionario repitió el viaje, a los mismos países europeos y también acompañado de su esposa, en esa ocasión estuvo 18 días.
Para ese segundo viaje, la Cámara Alta le conferió seis mil 750 euros, cercade 150 mil pesos, con los que supuestamente acudiría a un curso de capacitación e intercambio de conocimientos parlamentarios llevado a cabo en la ciudad de París.
Arturo Garita solo reportó gastos por la mitad de los viáticos, 72 mil pesos, pero tampoco entregó los comprobantes.
En ese viaje Garita y su pareja se hospedaron en un hotel de la ciudad de Pisa en donde pagaron dos mil euros, alrededor de 50 mil pesos por 10 días de hospedaje. También visitaron las ciudades de Roma y Milán, sus gastos los pagaron con los viáticos otorgados por el Senado.