Ya sabemos que hubo otros buscadores antes de Google, pero la gran pregunta es cómo logró hacerse más popular que todos ellos
Regeneración, 6 de septiembre de 2018.– En sus 20 años de historia, el buscador más usado en todo el mundo ha evolucionado hasta convertirse en un imperio con ocho servicios, que incluyen el navegador Chrome, el servicio de correo Gmail y la plataforma de video YouTube.
Todos superan los 1.000 millones de usuarios mensuales y le permiten facturar más de US$100.000 millones al año.
Pero su motor de búsquedas sigue siendo el producto estrella, desde que el 4 de septiembre de 1998 los ingenieros Larry Page y Sergey Brin lanzaron un proyecto para organizar información que les llevaría muy lejos
Hoy Google recibe millones de consultas y sus fundadores son multimillonarios.
Los «robots» de su navegador le permiten rastrear, ordenar y clasificar toda la información que hay la red, transformándola en enlaces y ofreciendo una lista ordenada según su propio criterio
Su dominio es tal, que resulta difícil recordar cómo eran las búsquedas en internet antes de Google.
Pero hubo otros motores de búsqueda que tuvieron éxito antes de que el «rey de internet» les destronara.
WebCrawler
WebCrawler fue el primer buscador web en ofrecer resultados con texto completo a partir de una palabra. Nació cuatro años antes que Google.
Su nombre significa «araña web» o «rastreador web», es decir, los programas informáticos que todavía inspeccionan la red hoy día.
Así lo explica el propio Google en su sitio web: «Usamos arañas web para organizar información de páginas web y otro contenido disponible públicamente en el motor de búsqueda».
El creador de WebCrawler fue Brian Pinkerton, un estudiante de la Universidad de Washington, EE.UU., pero la firma de servicios de internet America Online (la actual AOL) lo compró en 1995. En 2001, fue adquirido por InfoSpace.
WebCrawler se hizo muy popular en poco tiempo… pero pronto fue eclipsado por Lycos.
Lycos
En 1995 llegó Lycos, un proyecto de investigación de la Universidad Carnegie Mellon, en Pittsburgh, EE.UU., que más tarde sería comprado por Terra, una filial de Telefónica.
Lycos tuvo su momento de gloria durante el boom del «punto.com»: llegó a ser la web más visitada del mundo en 1999.
Pero la fusión con Terra fue un fracaso. Finalmente, la compañía fuea vendida a una empresa surcoreana, y más tarde a una firma india de marketing online.
AltaVista
También en 1995 nació AltaVista, uno de los buscadores más afectados por el éxito de Google.
Era innovador: usaba un rastreador rápido y un diseño minimalista. Pero Google ofrecía algo mejor y le quitó mercado.
Yahoo lo compró en 2003. 10 años más tarde se vio obligado a cerrarlo.
Excite
Excite fue lanzado a finales de 1995 y durante la década de los 90 llegó a ser una de las marcas más reconocidas en Estados Unidos, pero con el cambio de siglo llegó su declive.
Page y Brin intentaron adquirirlo antes de que eso ocurriera. Rechazar la compra «fue una decisión estúpida», aseguró el periodista Justin Rohrlich en 2010.
Yahoo
Yahoo todavía sigue plantándole cara a Google, pero nació antes que él… ¿adivinas el año? ¡1995!
En sus primeros años demostró tener éxito. Su error fue comenzar a llenarse los bolsillos con publicidad sin mejorar la calidad del buscador, algo en lo que Google le ganó.
¿Cómo logró triunfar Google?
Ya sabemos que hubo otros buscadores antes de Google, pero la gran pregunta es cómo logró hacerse más popular que todos ellos, pese a tener menos experiencia y ofrecer un producto similar.
Google controla hoy día el 90% de las búsquedas por internet y más del 60% de la publicidad en línea. Para muchos, es un monopolio.
Su enfoque comercial, basado en la personalización de los resultados de búsquedas, y la innovación constante son clave de su éxito.
Pero su algoritmo también tiene mucho que ver.
PageRank fue lanzado en 1999 por Page y Brin, los fundadores de Google, y sirve para medir la importancia de una página en una escala del 1 al 10. Es capaz de resolver una ecuación de 500 millones de variables y más de 2.000 millones de términos.
«Tú quieres una respuesta, no miles de millones de páginas web. (…) Nuestros sistemas ofrecen resultados útiles», explican sus creadores en el sitio de ayuda de Google.
Pero Page y Brin guardan en secreto la fórmula matemática que crearon y que mantiene su sistema por encima de los demás. Por eso lo reinventan constantemente.
Tal vez su verdadera gran hazaña fue comprender lo que los usuarios quieren. Al fin y al cabo, ¿qué otra empresa ha sido capaz de convertir su nombre en un verbo?.