Según la tradición taurina, cuando un toro asesina a un torero debe ser sacrificado junto con toda su casta.
Regeneración, 12 de julio de 2016.- En los días recientes han trascendido noticias de algunos toreros famosos muertos por cornadas propinadas por los toros que pretendían matar. El destino de estos toros es la muerte y la de su madre y hermanos.
El caso más reciente fue el del joven torero Víctor Barrio, quien murió en el acto tras recibir una violenta cornada del toro Lorenzo en el pecho. Esto ocurrió el pasado 9 de julio. Barrio tenía 29 años.
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No menos terrible fue el caso de la muerte del torero Rodolfo Rodríguez “El Pana”. A principios de mayo pasado el afamado torero recibió una cornada del toro «Pan Francés» que lo dejó cuadrapléjico. La condición del Pana se fue deteriorando y murió tras un mes de agonía.
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Estas lamentables muertes no terminan ahí: todos los toros que han asesinado a un torero, por tradición, tienen que ser sacrificados junto a toda su familia.
Cuando un toro mata a un torero el ganadero está obligado a sacrificar a la madre del animal y a toda su descendencia pues se piensa que la personalidad de estos animales se hereda directamente de la madre, mientras que las características físicas las transmite el padre.
Con información de RT.