Lo que parecía un escándalo de salud con el tema de la vacunación, ahora pinta para ser un caso totalmente político.
Regeneración, 25 de marzo de 2021. El escándalo de las vacunas falsas decomisadas por el gobierno de México sigue generando reacciones, y tras el descubrimiento de que el empresario Mohamad Yusuf Amdani Bai fue el encargado de importarlas, deja entrever que todo esto se trataría de una acción con tintes electorales.
Mohamad Yusuf Amdani Bai, quien ha sido señalado de ser el responsable de la importación de vacunas falsas Sputnik V, tiene un largo historial de beneficios con los gobiernos priistas –y con el actual presidente del PRI, Alejandro «Alito» Moreno– tendría una relación cercana desde hace varios años.
Esta relación surgió en 2015 cuando el priista era gobernador del estado de Campeche y Yusuf Amdani se convirtiera en el empresario de moda, tras ser vendedor de bienes raíces y gracias a la compra de un “área de reserva” dentro del complejo residencial ‘Campeche Hills’, considerado exclusivo durante el gobierno del líder priista.
La relación no sólo queda ahí, Alejandro «Alito» Moreno prestó en varias ocasiones las aeronaves propiedad del gobierno al empresario paquistaní, nacionalizado hondureño, posteriormente denunciado por el medio de información Página 66.
El medio de comunicación señaló que Alejandro «Alito» Moreno Cárdenas proporcionó las aeronaves oficiales para que empresarios extranjeros –en los que se incluye a Mohamad Yusuf–, nacionales y locales hicieran viajes con cargo al erario estatal, dentro del espacio aéreo local, regional e internacional, en sus primeros 16 meses en Palacio de Gobierno.
Esta información está documentada en los planes de vuelo entregados por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) al medio de información donde se señala que varias personas de la iniciativa privada usaron los aviones y el helicóptero, propiedades del gobierno de Campeche
Las bitácoras de vuelo narran que estas aeronaves se utilizaron para el transportarse tanto a ciudades del interior del estado, como a otras fuera de –tal es el caso de Cancún, Quintana Roo, Mérida, Yucatán, Toluca, Estado de México y hasta San Pedro Sula, Honduras.
Hoy, el nombre de Mohamad Yusuf Amdani Bai resuena en varios medios a partir de su reciente incursión en el empresariado de la salud, y particularmente, después de traer medicamentos para que los trabajadores de la maquiladora textil de su propiedad, Karim’s, fueran vacunados contra el coronavirus SARS-CoV-2. Acción que después fue confirmada por los mismos empleados.
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PUNTO ELECTORAL Y DESPRESTIGIO A LA VACUNACIÓN
A través de las columnas de opinión y de los trascendidos, comenzó a circular la información de que el PRI tiene, en su candidato a la gubernatura de Campeche Christian Castro, a uno de sus eslabones principales para no perder poder estatal y evitar la caída sospechada en las urnas.
Y para lograrlo, habrían ideado entre otras cosas traer a México al consultor político español Antonio Solá para apuntalar la candidatura del priismo en Nuevo León, lidereado por Adrián de la Garza, otro de sus “gallos” electorales.
Antonio Solá es considerado el autor intelectual de la guerra sucia que el PAN utilizó para la campaña presidencial de Felipe Calderón en 2006 con el eslogan al entonces candidato Andrés Manuel López Obrador, “un peligro para México”
Según los medios tradicionales, el encargado de traer a este personaje fue Rubén Moreira, el exgobernador priista y también hermano de Humberto Moreira –señalado de desfalcar al estado de Coahuila– para que los ayudará un par de semanas a la preparación de las campañas electorales en lo que diera inicio formal el proceso. Si Solá está para ayudar al PRI, ¿Campeche es otro de sus principales objetivos? No sería descabellado.
VACUNANDO Y DESPRESTIGIANDO
Al darse conocer la situación de las vacunas falsas, el Grupo Karim’s admitió que son suyas las vacunas Sputnik V, calificadas como “falsas” por Rusia y las autoridades sanitarias mexicanas, y después decomisadas en el aeropuerto de Campeche.
El grupo empresarial de origen hondureño afirmó que las cinco mil 775 dosis de la vacuna rusa decomisadas no eran para comercializarlas dentro del territorio hondureño, sino para inmunizar de forma gratuita a sus colaboradores y sus familias –tal y como empleados de la textilera del grupo señalaron al diario Milenio.
“En ningún momento y bajo ninguna circunstancia se pretendía introducir de forma ilegal vacunas al territorio hondureño. Ni a Grupo Karim’s, ni a sus ejecutivos se les ha imputado delito alguno en México”, destaca el grupo empresarial en un comunicado.
Sin embargo la gravedad de los hechos comenzó a sacar chispas políticas y sociales dado que, a través de las redes sociales, inició una oleada de comentarios cuestionando que este error era parte de una estrategia del Gobierno Federal, desatando una campaña de desprestigio a la actual jornada de vacunación argumentando que todas las vacunas rusas son falsas.
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“ESCAPAN” LOS DETENIDOS
No obstante, la Fiscalía General de la República (FGR) informó que los cinco ejecutivos del Grupo Karim’s, propiedad de Mohamad Yusuf Amdani Bai, huyeron del hotel donde estaban hospedados en Campeche.
La FGR señaló que esta situación se suscitó gracias a que el personal de Aduanas no puso a disposición de las autoridades a los siete tripulantes de la avioneta privada, en la que se decomisaron los cinco mil 775 frascos con la vacuna Sputnik V, por lo que ahora los fugitivos son buscados.
ALITO Y LOS MOCHES CON FACTURERAS
El círculo de corrupción, privilegios y compadrazgo no se cierra, y se sabe que entre 2015 y 2018 empresas privadas cobraron más de 152 millones de pesos de servicios a la administración de Alejandro «Alito» Moreno –resultando luego ser compañías enlistadas por el SAT como emisoras de comprobantes sin activos, personal, infraestructura o capacidad, mejor conocidas como “factureras”.
Según lo reportado por el sitio digital La Silla Rota, fueron 58 empresas “fantasmas” las que habrían recibido pagos en la administración de Alejandro «Alito» Moreno a través de este sistema de facturas, siendo el SISTEMA DE SALUD del estado al cual se le adjudicaba el pago.
El medio de información, Página 66 publicó en abril de 2020 que en los dos últimos años del exgobernador priísta, Fernando Ortega Bernés y los tres primeros de Alejandro «Alito» Moreno Cárdenas, se detectaron desvíos por 44 millones 513 mil pesos, operados por redes de corrupción y complicidad con empresas fantasma y factureras en el sector Salud de Campeche.
Estos dos datos confirman las complicidades que siempre han existido en la entidad para mantener el control, no sólo del dinero público, sino también del empresarial y político.
El ahora precandidato a la presidencia municipal de Campeche, Renato Sales Heredia, denunció la complicidad de los gobiernos priistas para cobrar “moches” por todo, e inclusive en el estado se dice que nada se hace si no hay un acuerdo entre autoridades y los empresarios.
Esto lo comentó el extitular de la comisión de seguridad en un programa de televisión donde se le pregunta sobre las problemáticas de la entidad y deja en claro que es la corrupción la que ha hecho más daño a Campeche y en todo el país, afectando el desarrollo de absolutamente todo.
“Muchísimos empresarios tuvieron que irse de Campeche por lo que se vivía. La empresas no llegan a Campeche porque había que mocharse durante los gobiernos. Si alguien quería invertir, tenía que aceptar las reglas de mocharse, los empresarios tenían que aceptar la regla del 50 + 1”, comentó Sales.
Mohamad Yusuf Amdani Bai logró hacerse de una nombre en Campeche junto con otros socios gracias a sus inversiones como Desarrollo Agroindustrial de Campeche, Calkini Fibers, Image Sportwear y Pride Tex México. Como lo comentamos, su crecimiento empresarial es tal que es propietario del hotel Ocean View y el complejo residencial ‘Campeche Hills’. ¿Acaso lo dicho por Sales Heredia fue efectivo también para él?
Aunque las campañas están casi listas para arrancar, el tema de la pandemia estaría ahora siendo utilizado para desalentar a las personas, y sobre todo, por medio del uso de las vacunas contra la Covid-19 como un tema político implementando la desconfianza a las autoridades, por lo que no debe dejarse de lado.
El doble discurso de los que acusan a la administración de López Obrador de utilizar el tema de las vacunas con fines electorales termina por voltearse y se convierte en su arma para intentar no perder el poder político que aún conservan algunos en los comicios de junio. ¿Qué lograrán con esto? En un par de meses se sabrá.