La constructora DIC amenaza al pueblo con un tala de árboles. Dicen vecinos que no conocen los documentos y piden que se revoquen permisos. Exijen la construcción de un parque.
Regeneración 5 de junio de 2019. Nuevamente el Pueblo de Santa Úrsula Coapa es amenazado con la tala de árboles y la construcción en el único espacio verde que tiene el pueblo, dicen vecinos.
El espacio resguarda cerca de 500 árboles y arbustos de diferentes especies, así como fauna nativa que rememora el antiguo ecosistema de los Pedregales ya prácticamente inexistente en la zona.
Los vecinos han defendido el lugar por años. En 2018 introdujeron escritos a la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial (PAOT) para denunciar lo que sucede en el lugar.
En el escrito explican:
«estamos desconcertados al saber que otorgan permisos para la construcción de departamentos en el pueblo a pesar de impactar de esta manera a la ecología y en cambio llevamos años pidiendo centros culturales, bibliotecas, casas de la tercera edad, parques dignos»
Los vecinos explican que para disfrutar de tales espacios tienen que ir a otras colonias donde existen lugares agradables al aire libre.
Los vecinos exigen en el documento al gobierno de Coyoacán y a las distintas dependencias pertinentes (Seduvi, Setravi, Dirección de Obras, Comisión de aguas del Gobierno central) que se lleve a cabo una reunión con los habitantes del pueblo.
Exigen además que se revoquen los permisos que se han dado a estas constructoras y que el espacio se destine a proyectos de la comunidad.
La empresa DIC ya ha ingresado en otros momentos a trabajadores para iniciar el derribo de árboles lo cual ha sido detenido por los mismos vecinos.
Esta empresa ya tiene antecedentes de beneficiarse a través de actos de corrupción en otros momentos, lo cual se puede consultar aquí
Hasta ahora se ha derribado entera la pared que circundaba el predio y se ha colocado una pared de láminas para facilitar la entrada de herramienta.
Crecen las inmobiliarias
Desde hace unos años las inmobiliarias se han expandido en la zona de los Pedregales con consecuencias sociales y ambientales negativas.
El caso más conocido hasta ahora es el de Aztecas 215, donde la inmobiliaria Quiero Casa ha construido encima de un manantial. La inmobiliaria ha tirado miles de litros de agua pura a las alcantarillas.
Otro caso es el de Xoco donde la inmobiliaria Mitikah taló 67 árboles de más de 20 años de edad.
Lo que ha detenido la voracidad de las inmobiliarias ha sido la organización de las colonias, las autoridades han tenido una iniciativa muy limitada.
Los vecinos esperan que este no sea otro caso más en el que se afecte al medio ambiente en beneficio de las constructoras.