Los impactos irreparables del fracking en el agua: contaminación irreversible y riesgo de derrames tóxicos. Pozos con 40% de riesgo de fugas
Regeneración, 5 de marzo del 2018. La Alianza Mexicana Contra el Fracking ha preparado este breve esquema sobre los daños irreparables al agua que ocasiona este método de explotación petrolera. Buscan mayor sensibilización y participación de la población para la defensa del medio ambiente
Numeralia
En cada pozo de fracking se utilizan de 9 a 29 millones de litros de agua y mas de 750 químicos.
El fracking contamina el agua de forma irreversible, retira grandes volúmenes del ciclo hidrológico local al quedarse atrapada en el subsuelo y pone en riesgo los acuíferos y cuerpos de agua superficiales por fugas y derrames de agua contaminada.
Por cada pozo se utilizan de 9 a 29 millones de litros de agua mezclados con arena y más de 750 químicos (muchos de ellos tóxicos).
Esta mezcla se inyecta a alta presión para fracturar la roca y liberar hidrocarburos.
Entre el 20% y el 95% se queda en el subsuelo.
El agua residual está altamente contaminada. Además del coctel inicial ahora trae hidrocarburos, metales pesados e incluso material radioactivo.
6% de los pozos nuevos tienen fugas, con los años esta cifra aumenta a 40%.
En Estados Unidos en 2013 hubo 7 mil 662 derrames y otros accidentes.
Las aguas residuales que se extraen, se almacenan en tinas impermeables, liberando tóxicos al aire. A veces el agua residual se envía a plantas de tratamiento que no están equipadas para tratar agua tóxica liberando productos cancerígenos.
También se suele enviar a pozos de inyección o “letrinas” donde se introduce el agua contaminada a profundidad.
El líquido puede lubricar fallas geológicas provocando sismos.
Oklahoma, estado sin actividad sísmica natural, ahora registra cientos de sismos hasta de 5.8 grados de magnitud.