Aunque la gasolina en México o el tipo de cambio bajen, los precios se mantienen por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
Regeneración, 05 de junio de 2018.- Cada año, los mexicanos pagan más por la gasolina que en Estados Unidos, y cada año, la difenrencia entre uno y otro país, aumenta también.
Según datos de la Comisión Reguladora de Energía de México y la Administración de Información de Energía, de Estados Unidos, durante el mes de abril, los mexicanos pagaron 29.7 por ciento más cara la gasolina magna y 19 por ciento más de la Premium, que los estadounidenses.
Típicamente en México se ha pagado más desde hace años, de hecho en 2017, antes del gasolinazo, ya se pagaba 9.5 por ciento más, en promedio por litro, que los estadounidenses.
Luego del gasolinazo, la diferencia de precios se elevó en un 21.1 por ciento.
Ayer, la Secretaría de Hacienda indicó que reduciría el subsidio que mantuvo durante casi toda la campaña presidencial, y para la segunda quincena de junio, se espera que el precio de la gasolina vuelva a subir, esta vez, por el cobro del Impuesto Especial sobre Producción y Servicio.
Este cobro a las gasolinas, se reduce y amplía a capricho de Hacienda o como dice la dependencia, cuando ve condiciones.
Según informó Enrique Galván Ochoa en su columna de hoy, “Cuando el precio internacional de la gasolina aumenta o cuando el peso se deprecia frente al dólar, el gobierno reduce el impuesto, el IEPS, que cobra a los consumidores, a fin de suavizar el impacto que tendría en los bolsillos un aumento mayor. Esto significa que Hacienda recibe menores ingresos. Es un impuesto acordeón, por decirlo así. Porque si el precio internacional de la gasolina baja, y baja el dólar también, entonces Hacienda puede ajustar al alza el impuesto, lo cual es lo que anuncia que sucederá. Por otro lado, termina la campaña política, un aumento importante hubiera perjudicado a los candidatos del partido en el gobierno”.
Así que si durante abril la gasolina en México costó 30 por ciento más que en Estados Unidos, para cuando terminen las campañas presidenciales, costará más.
Vía Reforma y La Jornada.