Un grupo armado atacó con armas de fuego a habitantes de tres comunidades del municipio de San Esteban Atatlahuca, en Oaxaca. Lo que provocó la muerte de siete personas y 25 familias desplazadas. La agresión continúa.
Regeneración, 24 de octubre del 2021. Un grupo armado atacó a las comunidades Ndoyonoyuji, Guerrero Grande, Mier y Terán perteneciente al municipio de San Esteban Atatlahuca, en Oaxaca. Durante la agresión siete personas perdieron la vida y 25 casas resultaron incendiadas, de acuerdo con el Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas.
La violencia en contra de las tres comunidades provocó que 25 familias fueran desplazadas y buscaran refugio en el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), ubicado en la ciudad de Tlaxiaco; pues el grupo armado mantiene sitiados a los habitantes de la zona.
El gobierno de Alejandro Murat emitió un comunicado hace unas horas e informó que estableció una mesa de seguridad para coordinar el ingreso a esas comunidades. A pesar de que el ataque inició el pasado jueves 21 de octubre.
“Derivado de los hechos violentos en las agencias Mier y Terán, y Guerrero Grande pertenecientes al municipio San Esteban Atatlahuca, el gobierno estatal y federal, instalaron la mesa de seguridad para coordinar el ingreso de los elementos de seguridad en la zona”.
Además, detallaron que la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO) y la Guardia Nacional realizarán un operativo de seguridad en la zona, con el objetivo de salvaguardar la integridad de las y los habitantes.
Por su parte, el presidente del CEDHAPI, Maurilio Santiago Reyes, exigió que el Estado Mexicano actué de manera urgente ante el estado de sitio que mantiene un grupo armado a los habitantes de esas comunidades.
¿Qué pasó?
El 21 de octubre, un grupo de sujetos incendió 25 casas en la comunidad de Ndoyonuyuji. También asesinaron a Remigio Gregorio Reyes García, de 69 años, y Rafaela Quiroz Sandoval, de 66 años, quienes eran padres de la autoridad municipal.
El 23 de octubre, ayer, un grupo armado atacó con armas de alto calibre la comunidad de Guerreo Grande y Mier y Terán donde asesinaron a Marcos Barrio Avendaño, de 80 años de edad; Marcos Quiroz Reaño, de 65 años; Tomas García Barrios, de 41 años; a Paulina Sandoval Bautista y Teodoro Velasco Sandoval, ambos de 95 años de edad.
Las agresiones provocaron el desplazamiento de 25 familias y alrededor de 30 personas, entre ellas mujeres y niños, están refugiados en la iglesia de la comunidad de Mier y Terán. Aunque los disparos continúan y están en riesgo de ser víctimas de una nueva agresión.
Por ello, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca demandó a las autoridades estatales y federales intervenir en la localidad para detener las agresiones que están generando desplazamientos.