La Seduvi permite que profesionales con carreras que nada tiene que ver con la construcción, sean responsables de obras en la Ciudad de México.
Regeneración, 1 de octubre de 2017.- Los encargados de la política de construcción de la Ciudad de México, ni siquiera son profesionales en la materia.
La ley establece que por lo menos deben contar con título y cédula profesional en carreras como arquitecto, ingeniero civil, ingeniero arquitecto, ingeniero constructor militar, diseñador en asentamientos humanos, urbanista, planificador territorial o tener título de maestría o doctorado en urbanismo o planeación urbana.
Sin embargo, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) del Gobierno de la Ciudad de México avala y permite que profesionales con carreras diferentes sean responsables de la política de construcción de la capital.
Por ejemplo, documentos oficiales de la Seduvi muestran que en la estructura de responsables se encuentra una socióloga, una química y un ingeniero mecánico electricista, además de un grupo de ocho Directores Responsables de Obra sin certificar, según la denuncia del presidente del Colegio Mexicano de Ingenieros Civiles (CMIC), Ricardo Meza Padilla, hecha desde mayo de 2016.
En el caso de Edna Elena Vega, socióloga de profesión, reconoce ser “socióloga de origen con maestría en planeación metropolitana y actualmente curso el doctorado en identidades urbanas. Durante casi ocho años fui asesora del Congreso de Diputados local, que en el Distrito Federal es la Asamblea Legislativa, justamente en el área de desarrollo urbano”.
Concepción Ingrid es una ingeniera química, es prosecretario del interior del Colegio Nacional de Ingenieros Químicos y de Químicos (CONIQQ).
En el caso de Raymundo Canales Cabrera, éste es corresponsal de instalaciones de obras del Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas, cargo que también ocupa en la nómina de la Seduvi, con el número de CI 0052.
Meza Padilla alertó con anterioridad que entre los DRO que no cuentan con la certificación está, Canales Cabrera, quien aparece como gerente general, Bufete de Ingeniería y Arquitectura SA.
Así, se encuentran por lo menos otros 10 DRO que fueron avalados por la Seduvi pero no cuentan con certificación.
Los otros DRO sin certificación son Federico García Soto, Román Alatriste Peredo, Miguel Ramos Quintana, José Guadalupe Sánchez García, Abel Ángel López Martínez, José Ángel Hernández Pineda, Juan Manuel Gamiño Hernández y Marcelo Alfonso González Reyes, todo ellos en la lista de DRO avalados por la Seduvi.
En el caso de los tres primeros, todos son peritos en desarrollo urbano (PDU), aunque los requisitos para desempeñar este cargo son “acreditar que posee cédula y título profesional correspondiente a alguna de las siguientes profesiones: arquitecto, ingeniero civil, ingeniero arquitecto, ingeniero constructor militar, diseñador en asentamientos humanos, urbanista, planificador territorial o tener título de maestría o doctorado en urbanismo o planeación urbana, en copia y original para su cotejo”.
Eso, por un lado, por el otro, está el curso exprés que imparte el Colegio Nacional de Ingenieros y Arquitectos de México de 30 horas, con pago de 3 mil 800 pesos, para que los que lo cursen puedan ejercer como Director Responsable de Obra (DRO) o Corresponsable en Diseño Urbano y Arquitectónico (CDUyA).
El curso es impartido por el ingeniero-arquitecto Jorge Antonio Mendoza Espinosa, que aparece en la lista oficial de los responsables de la construcción en la Ciudad de México, como DRO-1275, CDUyA-0337 y PDU-0172.
Cada curso dura 30 horas y tiene un costo de 3 mil 800 pesos, y si se desea obtener la licencia para DRO y CDUyA, el curso cuesta 4 mil pesos.
Al final del curso y de acuerdo con el Colegio Nacional de Ingenieros y Arquitectos de México, el participante estará en “condiciones de presentar el examen ante el comité técnico de la comisión de admisión de directores responsables de obra y corresponsables de Seduvi”.
Con información de Excélsior