Un volcán estaría naciendo en Michoacán; más de 200 microsismos serían la clave

De hecho en el llamado campo de volcanes de Michoacán-Guanajuato surgió en 1943 el coloso Paricutín el cual antecedió una serie de sismos
Microsismos en Michoacán podrían deberse al nacimiento de un nuevo volcán
Microsismos en Michoacán podrían deberse al nacimiento de un nuevo volcán

Regeneración 9 junio 2021. En Uruapan, Michoacán, entre el 1 de mayo y el 8 de junio se ha registrado un enjambre sísmico, es decir 242 microcosmos, seis de ellos con magnitudes mayores a cuatro lo que podría ser precursor del nacimiento de un nuevo volcán.

Cabe destacar que este tipo de fenómenos se presentaron en esa zona en 1997, 1999 y 2006, asi como en otras entidades como Durango, Chiapas y la Ciudad de México donde los movimientos surgen durante varos días y luego cesan.

Carlos Valdés, investigador del Instituto de Geofísica y actual director del Centro de Estudios Mexicanos (CEM) UNAM-Costa Rica indicó que se debe vigilar y monitorear estos enjambres sísmicos debido a que podrían ser precursores de la generación de un nuevo volcán.

Agregó que para que se registre una erupción volcánica o el surgimiento de un volcán se requiere actividad sísmica, deformación del terreno, emisión de gases y manifestaciones hidrotérmicas.

Valdés comentó que la pregunta principal es la posible actividad volcánica pues nuestro país es volcánicamente activo, especialmente en esa región donde hay mas de mil 200 volcanes pequeños.

De hecho en el llamado campo de volcanes de Michoacán-Guanajuato surgió en 1943 el coloso Paricutín el cual antecedió una serie de sismos.

Investigación 

Según la información recabada del 1 de mayo al 8 de junio se registraron 242 microcosmos en Michoacán. De enero a junio sumaron 305; además, en enero de 2020 se registraron enjambres sísmicos, por lo que hasta la fecha son cuatro mil 102 sismos.

Por su parte, el investigador del IGf, Denis Francois señaló que un enjambre sísmico es una condición importante pero no es la única para el surgimiento de un nuevo volcán.

Comentó que esos enjambres se asocian al movimiento de magma pero no siempre llegan a la superficie.

“Estos enjambres aparecieron en 1997, 1999 y 2006, y no llegó el magma a la superficie. Tal vez pasa lo mismo ahora, por lo que es muy importante seguir vigilándolos”, señaló Francois.

Por ahora se ha recomendado a los habitantes cercanos a la zona de movimientos sísmicos que están atentos de emanaciones de gases.