Al menos 340 ciudades de Estados Unidos han dicho públicamente que no participaran de las políticas y medidas de migración que promueven Donald Trump y los demás.
Regeneración, 17 de octubre de 2016.- La ciudades santuario surgieron en la década de los 80, y la denominación se extendió en cientos de urbes en los que se decidió no enjuiciar a los inmigrantes que cometieron sólo una falta administrativa de ingresar ilegalmente a Estados Unidos.
La primera ciudad en serlo fue California, y en los últimos cinco años unas 340 ciudades y municipios, entre ellas varias en los estados de California, Nueva York, Ilinois y Connecticut, aprobaron leyes que impiden a las policías locales participar en medidas federales de inmigración que son «voluntarias».
Una de estas medidas tienen que ver con la migración y sus polémicas ordenes de detención que buscan detener por más tiempo a indocumentados y hacer posible su deportación.
Hasta el momento, las ciudades santuario son San Francisco, Denver, Los Angeles, Chicago, Detroit, Portland, Nueva York, Filadelfia y Washington, algunas de las que buscan proteger a los migrantes.
También hay ciudades que han rechazado ser ciudades santuario como Miami-Dade, ubicado al sur de Florida.
Entre el amor y odio con los migrantes, varios sitios se se debaten.
Vía El Universal