Las relaciones entre Estados Unidos y Alemania pasan por su peor momento en muchos años
Regeneración, 13 de julio 2014.-El gobierno alemán anunció la expulsión del jefe de los servicios secretos estadounidenses en Alemania, tras descubrir a dos presuntos espías que trabajaban para Washington, una decisión inusual entre aliados de la OTAN.
“Pedimos al representante de los servicios secretos estadounidenses en la embajada de Estados Unidos que abandone Alemania”, declaró el portavoz del gobierno, Steffen Seibert, en un comunicado.
La expulsión se produce “como respuesta a una falta de cooperación (constatada) desde hace tiempo en los esfuerzos para esclarecer” la actividad de los agentes de los servicios secretos estadounidenses en Alemania, explicó en Berlín el presidente de la comisión parlamentaria de actividades de inteligencia, Clemens Binninger.
“Es justo que el gobierno alemán haya mandado una señal clara de que no se tolerarán este tipo de vulneraciones de la confianza y que debemos reenfocar” las relaciones germanoestadounidenses, declaró la ministra de Defensa Ursula von der Leyen.
La medida que anunció Alemania, muy inusual entre aliados de EU, tiene pocos precedentes que se le puedan comparar. El más parecido se produjo en 1995 cuando Francia pidió a Washington que retirara a varios agentes por espionaje en su territorio.
La Casa Blanca rehusó ayer comentar la expulsión, pero la embajada de Estados Unidos en Alemania dijo que era “esencial” continuar con una “estrecha cooperación” con el gobierno alemán “en todos los ámbitos”.
Tras el descubrimiento la semana pasada de un agente de los servicios de inteligencia alemanes (BND) sospechoso de trabajar también para la CIA, la fiscalía alemana anunció el miércoles otra investigación sobre un nuevo presunto caso de espionaje.
El caso tensó aún más las relaciones entre ambos países, empañadas ya por las revelaciones hace un año sobre el espionaje del teléfono móvil de la jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, por Estados Unidos.
Con la presión de la opinión pública, que pide un posicionamiento más firme respecto al antiguo país de la ocupación, la canciller pidió en repetidas ocasiones explicaciones a Washington, sin que recibiera ninguna respuesta.
Merkel subrayó el jueves la importancia de tener una relación de confianza, refiriéndose a las crisis internacionales como Ucrania, Oriente Medio o Afganistán. “Creo que en estos momentos, que pueden ser muy confusos, es decisiva la confianza entre aliados”, había declarado Angela Merkel durante una rueda de prensa antes de anunciarse la expulsión.
El comunicado de Seibert anunciando la expulsión se expresaba en la misma línea: “Es necesario que la confianza y la honestidad sean mutuas. El gobierno alemán sigue dispuesto a demostrarlo y espera la misma actitud de su aliado más cercano”.
El ministro alemán de Interior, Thomas de Maiziere, dijo que las informaciones que consiguieron los noreteamericanos eran de poco interés, según las primeras investigaciones, pero que “el daño político es grave y disproporcionado”, añadió.
Información: AFP