Indígenas desplazados continúan muriendo por hambre y frío en Chiapas

El párroco acuso que “si el Estado mexicano ya tenía el fallo, por qué permitió todo este sufrimiento en Chalchihuitán; siendo así, es un crimen del Estado mexicano. Por favor, no abandonemos a nuestros hermanos y hermanas, que no haya un muerto más”, clamó.

Regeneración, 14 diciembre 2017.- El párroco de Simojovel, Marcelo Pérez confirmó que suman ya nueve los indígenas que han fallecido en situación de desplazamiento forzado en las montañas de Chalchihuitán, Chiapas.

María Domínguez Gómez, de 57 años murió de pulmonía por el frío en el campamento 1 del paraje Pom el martes 12, a las 17:00 horas, refirió el religioso.

Adriana de Jesús Pérez, de dos años, y Maura Pérez Luna, de un año, fallecieron el 30 de noviembre y el martes 5, respectivamente.

El párroco aseguró que ya son nueve los fallecidos, principalmente mujeres ancianas y viejitos, así como pequeños que mueren por hambre, frío, diarrea, pulmonía y otras enfermedades que podrían prevenirse o evitarse si las más de cinco mil personas no vivieran en situación de desplazados desde hace más de un mes.

Apenas ayer miércoles, el Tribunal Unitario Agrario falló a favor de Chenalhó al reconocerle la propiedad de más de 350 hectáreas de tierras que estaban en disputa entre los límites de ambos municipios.

“El fallo se firmó el 6 de noviembre, ¿qué significa? Que pudieron haberse evitado los desplazamientos de más de 5 mil personas, pudieron evitarse las muertes por hambre y frío por estar desplazados.

“Si el Estado mexicano ya tenía el fallo, por qué permitió todo este sufrimiento en Chalchihuitán; siendo así, es un crimen del Estado mexicano”, acusó.

“Por favor, no abandonemos a nuestros hermanos y hermanas de Chalchihuitán, que no haya un muerto más”, clamó el párroco.

 

Con información de Proceso y La Jornada