‘No somos botín electoral’: opositores a gasoducto de TransCanada en Puebla

Pobladores señalaron que hay operadores “partidistas” que pretenden “colgarse” de sus batallas para ofrecerlas a algunos partidos políticos, incluso construyéndose “una imagen falsa de líderes y luchadores sociales y hasta defensores de derechos humanos”, se deslindaron de su actuación y de cualquier acuerdo que pudieran hacer en su nombre.

Regeneración, 29 enero 2018.- El Consejo Regional de Pueblos Originarios en Defensa del Territorio de Puebla e Hidalgo denunció la intención de algunos políticos de aprovechar la lucha que mantienen contra el gasoducto Tuxpan-Tula de la empresa TransCanada para ofrecerla como “su capital” en la próxima contienda electoral y advirtieron que no cederán en su reclamo de que se cancele este megaproyecto.

Pobladores de los municipios de Honey, Pahuatlán y Tlacuilotepec señalaron que hay algunas personas y operadores “partidistas” que pretenden “colgarse” de sus batallas para ofrecerlas a algunos partidos políticos, incluso construyéndose “una imagen falsa de líderes y luchadores sociales y hasta defensores de derechos humanos”, por lo que se deslindaron de su actuación y de cualquier acuerdo que pudieran hacer en su nombre.

Sin decir nombres, aseguraron que se trata de personas que “jamás han trabajado en las comunidades, ni colaborado en la construcción de las redes de resistencia y articulación social para enfrentar las amenazas y necesidades de los pueblos de la región” y aclararon que han sido los propios habitantes los que durante dos años han mantenido, incluso económicamente, la resistencia contra los denominados proyectos de muerte.

“Aquí, en la Sierra Norte de Puebla, en los municipios amenazados por el gasoducto Tuxpan-Tula, los pueblos otomíes, nahuas y totonacos, hemos mantenido con nuestros propios recursos la defensa colectiva de nuestros territorios por dos años y que por iniciativa propia hemos reivindicado los consejos indígenas como espacios organizativos y de concientización popular. Tenemos claro que la única manera de superar la descomposición social de nuestra entidad no puede depender de los caciques y farsantes que se disputan a muerte apoyos y favores que les permitan candidatearse para las próximas elecciones municipales”, afirmaron.

Previeron que a causa del proceso electoral, tanto su lucha como la que se libra en otras regiones de la Sierra Norte contra los proyectos de la industria extractiva minera e hidroenergética atravesará por momentos difíciles, debido a que será “cruzada por dos fuegos: el de los operadores políticos locales, sedientos de poder a toda costa, y el habitual ataque de las empresas, como  TransCanada y Bonatti, sus comisionistas locales y del gobierno federal”.

Detallaron que intervención de los partidos políticos en la resistencia, además de provocar división en las comunidades, pone en riesgo la integridad física de los habitantes, de la misma manera en que lo hace la “corrupción del poder público en un país destruido por la irracionalidad económica impuesta desde fuera”.

“La denuncia que en otros estados se ha hecho respecto de los modos en que se conducen los operadores locales de la supuesta izquierda partidista es vigente también en Honey, Pahuatlán y Tlacuilotepec, donde ni siquiera la popularidad de Andrés Manuel López Obrador podrá suplir o compensar las carencias y la realidad miserable de quienes, al fin pragmáticos oportunistas y lambiscones por costumbre, ahora se declaran sus más fieles seguidores”, añadieron.

 Por ello, dijeron, “no venderemos la lucha al mejor postor, ni seremos capital político para candidatos y partidos, como tampoco cederemos en nuestros reclamos ni negociaremos con nuestros derechos”.

 

Con información de Leticia Ánimas (Puebla)