Una funcionaria dijo a la madre de la pequeña que los encargados de activar la Alerta Amber estaban de vacaciones
Regeneración, 31 de diciembre de 2017.- Karina Lynn Peñaloza Romero aseguró que el pasado 24 de diciembre, Juan Diego Crisostomo Crisostomo, su expareja y padre de su hija de 3 años, Estrella Kristell Crisostomo Peñaloza, se llevó a la niña sin su consentimiento.
La madre contó a medios locales que los hechos se dieron en un establecimiento de comida rápida en Pachuca, Hidalgo.
“Nos citó frente al mercado Benito Juárez y de ahí caminamos rumbo al Reloj y dijo ‘tengo hambre’. Entramos al Burger King que está en la esquina; ahí me dijo que ordenara, pero cuando regresé a la mesa ya estaban otras personas quienes me comentaron que se había salido corriendo con la niña”, relató Karina.
Ante lo ocurrido, la mujer pidió ayuda a policías estatales, quienes procedieron a remitirla al Centro de Atención a Víctimas (Cavi) de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, cuyas oficinas se localizan en la colonia San Javier de Pachuca, así lo da a conocer SDP Noticias.
Una vez que estuvo ahí, Karina fue canalizada a la Subprocuraduría de Derechos Humanos y Servicios a la Comunidad de Hidalgo, donde una funcionaria, quien redactó un acta informativa sobre el plagio de la pequeña, le pidió que regresara hasta el 26 de diciembre para darle a conocer el avance del caso.
Más tarde, Juan Diego se comunicó con Karina para decirle que su hija estaba bien, pero le advirtió que ya no se la regresaría.
Cuando la madre volvió a las instalaciones de la PGJH, la servidora pública le aseguró que no se podía hacer nada, pues los agentes del ministerio público y los policías investigadores encargados de la activación de la Alerta Amber, estaban de vacaciones.
“La licenciada que me atendió me dijo que el agente del ministerio público estaba de vacaciones por lo que realmente la policía no me está ayudando nada”, denunció la afectada.
Tras lo sucedido, la mujer elaboró carteles con la foto de su hija y de Juan Diego Crisostomo Crisostomo y los colocó por calles y avenidas de Pachuca.
A casi una semana del robo de la niña, Karina aseguró contar con información de que aparentemente, tanto Juan Diego como su hija se encontraban en la Ciudad de México.
La mujer relató que la menor al momento de ser sustraída vestía un mallón negro y una sudadera verde pistache y calzaba además unas sandalias color azul.