Restauración ecológica de ríos, no privatización

Extraer más agua pone en peligro bosques mesófilos y población de Xalapa por cambio climático. Se analiza la privatización del agua del Río Antigua

Regeneración, 17 de junio del 2018. Luego de la publicación de los 10 decretos privatizadores del agua en   cuencas de México, las críticas y observaciones no se han hecho esperar. Renée González Montagut, señala que extraer más agua de la cuenca del río Antigua es más caro, contraproducente ecológicamente por los servicios ambientales que prestan los bosques mesófilos, entre otras situaciones, frente al cambio climático.

Inicialmente publicamos en Regeneración.mx, el artículo 55% de agua superficial a privatización en México.

Lo siguiente es lo que publicó Renée González directamente en la página de la Comisión Federal Regulatoria (COFEMER) y señala lo siguiente:

El decreto pone el fin de la veda para atender demanda de agua para uso doméstico y urbano, mencionando específicamente la preocupación de abastecimiento de agua para ciudad de Xalapa.

La solución no es una mayor extracción de los ríos en una ciudad que recibe mil 400 mm de agua de lluvia al año.

El ciclo hídrico dentro de la ciudad puede cerrase sin recurrir a mayor extracción a través de captación de agua de lluvia, vasos para reservas de agua en tiempo de estiaje, reducción de fugas que derivan en 40% de pérdida y saneamiento efectivo de aguas.

Eliminar la veda para extraer agua de los ríos y abrir la posibilidad de infraestructura en una zona de tan alta importancia ecológica como es el bosque mesófilo y la vulnerabilidad al cambio climático es un error.

Considerando los escenarios de cambio climático para la cuenca del río Antigua, que proyectan huracanes más intensos, la conservación de los ríos y la vegetación a lo largo de las mismas es prioritaria en esta cuenca de altísima biodiversidad.

De acuerdo a la UNAM y a los jardines Botánicos de Kew esta cuenta está clasificada como una de las tres regiones de mayor biodiversidad den arboles en México.

Y México tiene diez veces mayor diversidad de árboles que lo que le corresponde al 1.5% de la superficie terrestre que nuestro país ocupa a nivel mundial.

Esta infraestructura natural es la que protegerá a la población de deslaves en la parte alta de la cuenca (al retener suelos y evitar azolvar los ríos) y de inundaciones cuenca abajo.

Estudios en el Pixquiac, muestran como la vegetación a lo largo de este sano río disminuye a la mitad la contaminación fecal (E.coli) y son estos bosques, que dependen del agua de los ríos, los que abastecen Xalapa del 35% de su agua.

En lugar de extraer mas agua de la cuenca del Antigua, deberíamos estar pensando en incrementar el abastecimiento por restauración de cuencas, como la de Huitzilapan, que abastece el 65% del agua de la ciudad.

Su aportación incrementará si se mejora su infraestructura natural por medio de la restauración, la cual es menos costosa que la ifraestructura que implica una mayor extracción.

El estudio de Chichilinsky y et al en Manhattan miestra cómo se redujo la inversión en tratamiento de agua seis veces al restaurar las montañas Catskill en lugar de constuir infraestructura.

La restauración ecológica de ríos se ha privilegiado en otras ciudades como Boston y sin dida es la solución a un futuro de cambio climático en el que tenemos que usar la inteligencia para proteger nuestros entorno y a nosotros mismos.

La cuenca del río Antigua tiene importancia y trabajos únicos en el país.

Esto ha traido recursos y publicaciones internacionales.

El trabajo de más de una década para restaurar y monitorear el río Pixquiac ha resultado en una alta cobertura de bosque mesófilo gracias a inversiones a nivel federal, estatal y municipal, así como fundaciones privadas y apoyos multilaterales.

Prestigiosas publicaciones avalan esto como ejemplo.

No lo echemos a perder.