A Ndakasi la rescataron en el 2007 cuando un guardabosques de Virunga la encontró con dos meses de edad aferrada al cuerpo sin vida de su madre
Regeneración 7 octubre 2021. La fotografía de la gorila Ndakasi quien falleció en los brazos de su cuidador ha dado la vuelta al mundo.
A Ndakasi la rescataron en el 2007 cuando un guardabosques de Virunga la encontró con dos meses de edad aferrada al cuerpo sin vida de su madre.
Esta había sido asesinada a tiros por milicianos armados.
Tras su rescate Ndakasi conoció a Andre Bauman, quien fue su cuidador por más de 14 años.
“Durante toda la noche, Andre sostuvo al bebé cerca de él, manteniendo su pequeño cuerpo apretado contra su pecho desnudo para darle calor y comodidad”, indicó el parque Virunga.
Al cumplir 14 años, Ndakasi enfermó de manera prolongada hasta que finalmente el pasado 26 de septiembre falleció en los brazos de su cuidador.
“Virunga anuncia con profunda tristeza la muerte del amado gorila de montaña huérfano Ndakasi”, informó el Parque Nacional de Virunga.
La publicación muestra la imagen del momento en que Andre, su cuidador de toda la vida la toma entre sus brazos esperando su deceso.
“Tras una enfermedad prolongada en la que su estado se deterioró rápidamente, Ndakasi tomó su último aliento en los amorosos brazos de su cuidador y amigo de toda la vida, Andre Bauman”, se informó.
It is with heartfelt sadness that Virunga announces the death of beloved orphaned mountain gorilla, Ndakasi.
C’est avec une profonde tristese que Virunga annonce le décès du gorille de montagne orpheliné Ndakasi.https://t.co/GdkJbhWESz pic.twitter.com/bsCKdEq8tB
— Virunga NationalPark (@gorillacd) October 5, 2021
Por su parte, Andre confesó que se siente muy feliz de haber sido parte de Ndakasi.
“Fue un privilegio apoyar y cuidar a una criatura tan amorosa, especialmente sabiendo el trauma que sufrió Ndakasi a una edad muy temprana”, indicó Andre.
Agregó que se siente muy orgulloso de haber llamado a Ndakasi su amiga.
«La amaba como a una niña y su personalidad alegre me hacía sonreír cada vez que interactuaba con ella”, confesó.