Cómo pintar (bien) y no morir en el intento

En este artículo, Bárbara Tello, arquitecta, hace una serie de recomendaciones para pintar una habitación.

 

pintora

Por Bárbara Tello.

Regeneración 25 de mayo de 2016.- De aquí que hago mi blog titulado “Cositas de Barby”, les dejo algunas recomendaciones de pintura y brochas para quien lo necesite.

(Esto es para pintura Vinílica)

La mejor pintura que conozco es la Behr Premium Plus y la venden en el Home Depot. He probado la Comex (en sus diferentes tipos, calidades, etc). Igualmente la Berel (Ésta es, creo, aún es más chida que “cualquiera” de la Comex. También probé una de Sherwin Williams, y claro necesito probar más. Pero creo me pararé en la Comex solamente para comprar la revista Sensaciones (que antes me regalaban, y ahora cuesta, pero trae proyectitos e ideas varias para la “inspiración”). La que recomiendo de Behr Premium Plus es la Pintura Interior-Exterior Esmalte Brilloso. Yo odiaba lo brilloso, todo lo que no fuera mate. Pero esta pintura no brilla mucho, es espesa, te ahorras una capa, es fácil de limpiar con un trapo mojado después. La pensaba poner sólo en baños y cocinas, pero no, hasta la sala merece esta pintura. Yo no quiero volver a pintar hasta dentro de 20 años…

Luego vienen las brochas, ahí si me cae que he probado de todas las que hay en el mercado, ferretería de confianza y hasta puesto en Corregidora. Yo ya no compro de cerdas normalitas, sino de poliéster con nylon. Sus cerdas son amarillas, blancas, rositas, “cafeseses”, etc. Pero no negras. Son más costosas, pero para detalle rifan.

Tienen más cuerpo, son más exactas y no parece que nadie las mordió después de unas dos o tres lavadas. Mis marcas favoritas son Brotimex, Trylon Platinum Pro y Comex, en ese orden.

Las Trupper y Pretul sacan a una de apuros, pero si es un trabajo ya más profesional, no escatimen, de verdad. Una buena brocha bien lavada y cuidada les durará años.

Si voy a pintar durante varios días seguidos, dejo mi brocha remojando en agua (sólo las cerdas quedan en agua) en un contenedor con tapa. Al contenedor le hago un orificio pequeño en la tapa para que quepa el mango de la brocha y lo cierro bien. Al otro día seco la brocha con un trapo y sigo pintando.

Nunca mojo la brocha con pintura más allá de 1/3 de las cerdas, porque sino será difícil lavar la pintura que está más arriba en las cerdas ya pegado al metal de la brocha.

Si sé que ya la voy a dejar de usar, le lavo su carita con agua y con jabón, y le desenredo el pelo con peine de marfil… Ah, no, esto último no… La lavo bien hasta que no vea el agua clara saliendo de la brocha. También la puedo dejar remojando un par de horas en agua y después lavarla para no desperdiciar tanta agua.

Si ya la regué, pensé que iba a pintar pronto, o lo que sea y mi brocha tiene pintura seca la dejo remojando en agua caliente con vinagre por un par de horas, después con un cepillo de dientes viejo la lavo bien, bien. Si es necesario uso mis uñitas para quitar la pintura más seca o corto los pelos que ya tienen pintura muy seca. Igual que cualquier artista, cuido mis brochas de paredes como si fueran lo más preciado en la vida, y lo son. Como les decía las brochas sintéticas no son baratas, por lo tanto hay que cuidarlas.

Si no tienen un contenedor para cada una de sus brochitas y al día siguiente van a pintar, remojen la brocha en pintura, póngale su bolsita de plástico con zipper (que cierre) o triple nudo y métanla al refri.

Y de verdad, ya por último pinten en este orden: techo, paredes, detalles en ventanas y puertas, zoclo. No pinten con mucha fuerza que salpica todo.

Si es con rodillo, cubran todo, salpica mucho. Protejan contactos, muebles, piso siempre. Escurran su rodillo por el amor de dios, y no empapen su brocha en pintura, solo una tercera parte de las cerdas de la brocha.

Planeen antes de pintar, neta no pinten a lo güey, sale “pior” después. Póngase ropita adecuada. Poco a poco serán más limpios y exactos.

Cuando ya no vayan a ocupar el contenedor que tiene poca pintura o la charola del rodillo, sáquenle toda la pintura con la brocha, no lo dejen remojando. Esperen a que se seque la pintura y después ya seca quítenla a mano, se hace un plástico que es fácil de jalar.

Muchas de las tareas que se hacen para mejorar la casa no son complicadas, pero sí laboriosas, ahora que si tiene n poco tiempo y les sobra dinero, contraten a un pintor que seguro sabrá cómo hacerlo o pídanle a alguien que les ayuda, pero eso sí, provéanle agua y una buena comida.