Por Ricardo Sevilla
RegeneraciónMx.- Hace poco más de cuatro meses, el Senado aprobó, con 68 votos a favor y 58 en contra, la Reforma a la Ley Eléctrica.
Pese a que esta medida, además de promover un mercado equitativo para garantizar la seguridad energética, busca eliminar los subsidios y políticas de dumping que favorecían a las empresas privadas y perjudicaban a la población mexicana e incluso a la propia CFE, Germán Martínez decidió votar en contra de dicha reforma.
Pero no es la primera vez que Martínez Cázares, quien actualmente funge como senador plurinominal por Morena, intenta boicotear al Gobierno Federal.
No hay que olvidar que durante su efímera y polémica gestión al frente del IMSS ⎼de diciembre de 2018 a mayo 2019⎼ el expanista avaló la firma de 32 contratos a guarderías privadas (que operarían en la Ciudad de México e Hidalgo) por más de mil 380 millones de pesos, bajo el esquema de subrogación de servicios.
De acuerdo con un reportaje publicado en julio de 2019, en Contralínea, “la corta gestión del panista Germán Martínez Cázares comprometió recursos públicos hasta 2024. Y es que, entre enero y abril de ese mismo año, el Instituto, encabezado en ese momento por el expanista, contrató 22 empresas para asegurar la existencia de 24 guarderías subrogadas por los siguientes 4 años 9 meses”.
Cabe destacar que López Obrador no sólo ha sido sumamente crítico con este esquema, sino que incluso ha planteado su desaparición: “Vamos a terminar con los abusos que se cometían en la prestación de servicios, la famosa subrogación. Esto que hasta las guarderías las subrogaban, se le daban contratos a particulares para manejar la salud, la seguridad social, temas tan delicados que se pusieron al mercado, como si fuera mercancía, todo por la ambición al cochino dinero”.
Pero los embates de Martínez Cázares contra López Obrador no son recientes. Sus acometidas contra el tabasqueño son añejas.
¡Vamos a chingar al Peje!
Hay que recordar que, en las contiendas presidenciales de 2006, 2012 y 2018, Martínez Cázares fue uno de los críticos más virulentos de AMLO. “¡Vamos a chingar al Peje!, ¡Vamos a chingar al Peje!”, solía vociferar Germán, enardecido, durante el juicio de desafuero, de acuerdo con Manuel Espino.
Martínez Cázares no sólo fue funcionario público durante el sexenio de Calderón. Germán y el expresidente, cuyo desmedido gusto por el alcohol se ha impuesto en el imaginario nacional, tienen una amistad larga y entrañable.
Por otra parte, Martínez Cázares, según nos revelan fuentes al interior del mismo PAN, también tiene una relación de compadrazgo con el empresario Agustín Coppel Luken, financiador de la llamada Operación Berlín.
De hecho, en 2017, desde una vieja casona ubicada precisamente en la calle de Berlín, en Coyoacán, Martínez Cázares fue uno de los encargados de ayudar a impulsar la (fallida) candidatura de Josefina Vázquez Mota a la gubernatura del Estado de México. Y Agustín Coppel, como al resto del equipo de los implicados en la “Operación Berlín” lo financió.
Defensa y relación con grupo Coppel
El 9 de noviembre de 2010 seis mujeres que trabajaban (encerradas) en una tienda Coppel de Culiacán murieron asfixiadas y calcinadas. Al menos once más resultaron intoxicadas. Los trabajadores que fueron entrevistados en ese momento acusaron que era habitual que la empresa los recluyera de noche para inventarios o cortes de caja. Los bomberos y algunos voluntarios intentaron romper cortinas y candados, incluso con gatos hidráulicos, pero no lo consiguieron. Tuvieron que recurrir a la utilización de maquinaria pesada para abrir boquetes en las paredes a fin de que el humo se dispersara. 13 horas llevó sofocar el fuego propiciado por la negligencia empresarial de Coppel.
El director de Protección Civil dijo que fue imposible salvar a las trabajadoras por tanto humo y porque las cinco puertas estaban cerradas.
El despacho de Fernando Gómez Mont, exsecretario de Gobernación calderonista, fue contratado por Coppel S.A. de C.V. para protegerse contra las posibles consecuencias penales (y criminales) del incendio.
Además de la ayuda de Gómez Mont, el despacho de Germán Martínez Cázares, Abogados Asociados FGZ Estrategias, se ofreció a brindar apoyo legal a Grupo Coppel. El actual senador plurinominal por Morena, al ser cuestionado sobre el tema, respondió, simple y llanamente, que él no daba “explicaciones públicas de sus actividades privadas”.
Traicionó al PAN, fue a Morena y volvió a traicionar
Aunque muchos supusieron que, después de haber sido acogido en las filas de Morena, Martínez Cázares depondría sus ataques contra López Obrador, no ocurrió así.
Lo único que cambió, en todo caso, es que sus críticas contra López Obrador ya no fueron bajo los colores del PAN, sino, paradójicamente, desde las filas de Morena.
Martínez Cázares, de acuerdo con la versión de varios personajes que trabajaron en la llamada “Operación Berlín”, sigue “trabajando para su amigo Calderón y su compadre Coppel”.
Reforma y Radio Fórmula, los aliados estratégicos vs. AMLO
Además de haber intentado que el IMSS continuara subrogando servicios y de votar contra la Reforma a la Ley Eléctrica, Germán Martínez continúa lanzando críticas furibundas contra el Gobierno Federal que encabeza AMLO.
Utilizando los espacios editoriales y los micrófonos de los empresarios Rogerio Azcárraga Madero (propietario de Radio Fórmula) y de Alejandro Junco de la Vega (dueño de Reforma), Martínez Cázares se dedica a rebatir, contradecir y vilipendiar las políticas del actual Gobierno federal.
En Reforma, por ejemplo, Martínez Cázares ha dicho, mediante estratagemas retóricos, que el Ejército mexicano es corrupto, subroga servicios y tiene preferencias personales en las adjudicaciones directas.
https://www.reforma.com/militarismo-amlo-y-madero-2021-01-21/op197852
De Operación Berlín al programa de Ciro
Las instalaciones de Radio Fórmula, ubicadas en avenida Universidad 1273, son frías y, por lo regular, Germán lleva puesta una chamarra gris. Curiosamente, es la misma que solía usar cuando acudía a colaborar en la conjura contra López Obrador en la calle de Berlín, número 245, en la alcaldía de Coyoacán, en la Ciudad de México.
Es importante señalar que, de noviembre de 2016 a 2018, Martínez Cázares, junto con Enrique Krauze, Fernando García Ramírez (brazo derecho del director de Letras Libres) y el exfuncionario calderonista Ricardo Rojo, encabezaron una ofensiva contra López Obrador.
En el reportaje Operación Berlín: Conjura AntiAMLO, publicado en marzo de 2019 por el semanario Ejecentral, Germán Martínez reconoció que “asistió a la casa de Berlín, pero por invitación de compañeros panistas, quienes preparaban la campaña contra Delfina Gómez, candidata de Morena al gobierno del estado de México y rival de la panista Josefina Vázquez Mota”.
Lo que Martínez Cázares no dijo fue que, antes de que el reportaje saliera a la luz, sostuvo una conversación telefónica con Raymundo Riva Palacio, director de Ejecentral. Durante esa llamada, el amigo de Felipe Calderón y compadre de Agustín Coppel aceptó contar parte de la historia al columnista de El Financiero a cambio de una sola petición: que Riva Palacio “no raspara” tanto su nombre.
Riva Palacio aceptó. Pero Martínez Cázares, en realidad, tuvo un papel más relevante de lo que pretende hacer creer.
El político michoacano no sólo acudió en calidad de invitado a la casona de Coyoacán, sino que, en compañía de Margarita Zavala y Consuelo Sáizar Guerrero (exdirectora del extinto Conaculta y exdirectora del FCE), colaboró ofreciendo asesorías, participando en reuniones y sugiriendo varios de los tópicos que encabezaron las calumnias contra AMLO.
Junto con su amigo Ricardo Rojo (quien tuvo a su cargo la coordinación de las granjas de bots en Berlín), Martínez Cázares aportó muchos de los claims, eslóganes y taglines que acompañaron la guerra sucia contra el actual presidente de México.
Cuando Germán abandonó el barco panista, Fernando García Ramírez, Berlín fue desmantelada rápidamente y, durante la reunión que sosteníamos diariamente con el vocero de Enrique Krauze, Fernando García Ramírez, nos dijo: “Hay que estar tranquilos. Si Germán habla, nosotros tenemos todas las pruebas de que Coppel también le pagaba”.
“No extraña que Cárdenas y el dictador Fidel Castro hayan comido algún día en el mismo plato”
En agosto de 2014, en un artículo titulado “Cárdenas ha muerto”, publicado en Reforma, Martínez Cázares, acusó a histórico expresidente Lázaro Cárdenas de haber sido el causante del atraso de este país.
El compadre de Agustín Coppel escribió que en México existe una “patología cardenista”, que “el general Cárdenas representa muchas de las causas del atraso del país”, y que: “No extraña que Cárdenas y el dictador Fidel Castro hayan comido algún día en el mismo plato”.
https://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=32896
Germán Martínez, de acuerdo con el testimonio de algunos panistas, “es un tipo al que no se le puede dar la espalda, porque te traiciona. Ahorita que está en Morena habla pestes de ese partido, pero también lo hizo cuando estuvo en el PAN”.
Y, en efecto, en junio de 2015, en un texto titulado “PAN: Ética de la dimisión”, publicado en la revista Nexos, Martínez Cázares, con una mano en la cintura, enumeró los peores vicios del partido al que había pertenecido, llamándolo corrupto, traidor, clientelar, irresponsable, autoritario y regresivo:
“Los panistas traicionamos el impulso libre e individual del ciudadano como motor de transformación política y, por eso, dejamos al país al borde de una regresión autoritaria”, apuntó Martínez Cázares en la revista propiedad de Héctor Aguilar Camín.
“Los recientes episodios de corrupción panista denunciados por la prensa tienen su motivación en engordar, acrecentar y mantener fieles a esos rebaños. En muchas ocasiones el poder político fue usado para conservar esas clientelas; en otras, las prerrogativas partidistas se utilizan con ese propósito; y lo que es peor: se alientan desde los gobiernos panistas políticas sociales asistencialistas para favorecer a esas legiones o pelotones internos. Pocos en el PAN critican los programas de gasto público irresponsable, al contrario, muchos luchan por mantener su control y titularidad”, agregó.
“… el peor pecado del PAN (claro que me incluyo en la confesión) fue convertir su victoria cultural de alcanzar una “democracia imperfecta”, en solapar, promover y apuntalar una “democracia perversa”, donde el dinero, la militancia cooptada, la componenda gubernamental, el clientelismo político, la ausencia de debates y la mudez de argumentos, abrieron la puerta a candidaturas sin aprecio por la libertad, y a gobiernos sin tareas de largo aliento, sólo gestores de coyunturas, contentos con lucir en desfiles, “coronaciones” de “reinas” y salutaciones para fotografías.
https://www.nexos.com.mx/?p=25125
Enriquecimiento repentino
La casa de Martínez Cázares, quien renunció a la presidencia del PAN en 2009 tras la peor derrota electoral en la historia del partido, mide 743 metros cuadrados y se la vendió, en mayo de 2010, Carla María Compeán Woodworth, hija del presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Justino Compeán.
Lo curioso es que Martínez, que había sido diputado federal los tres años anteriores, declaró no tener casa ni vehículos propios. Era dueño, según dijo, sólo de un óleo con valor de 250 mil pesos, tres plumas y un reloj que, en conjunto, costaban 3 mil pesos. También tenía un millón de pesos en artículos electrodomésticos.
En una declaración realizada el 6 de noviembre de 2006, Martínez Cázares dijo que tenía en el banco una inversión por 750 mil pesos, pero debía en tarjetas de crédito mil 500 dólares y 40 mil pesos mexicanos.
No obstante, casi un mes después, según consta en su declaración inicial como secretario de la Función Pública –el 19 de diciembre de ese mismo año–, la fortuna comenzó a estar de su lado: se compró una casa con valor de 2 millones 665 mil pesos con un crédito que obtuvo a dos semanas de tomar posesión del cargo.
Pese al crédito hipotecario, que ascendió a 2 millones 132 mil pesos, Martínez declaró que seguía teniendo 750 mil pesos en el banco y sólo agregó otros 50 mil.
Para cuando concluyó su breve gestión como servidor público para buscar la presidencia del PAN, en octubre de 2007, Martínez ya se había comprado un automóvil Honda del año, tenía cuentas bancarias por 250 mil pesos y contaba con un seguro de retiro de 424 mil pesos.
Martínez presidió el PAN sólo durante un año y nueve meses, de diciembre de 2007 a agosto de 2009, lapso en el que cobró un sueldo mensual de 128 mil pesos netos, de acuerdo con información oficial.
Pero eso no fue todo. Nueve meses después de haber dejado el cargo –tras la peor debacle electoral del partido blanquiazul, que contrajo una deuda de más de 300 millones de pesos–, Martínez estrenó casa: la que le compró a Compeán Woodworth en la zona de San Ángel Inn, un barrio de alta plusvalía en la Ciudad de México.
En el Registro Público de la Propiedad (RPP) consta que la operación se realizó el 26 de mayo de 2010. Se trata de una propiedad de 743 metros cuadrados de terreno, sobre el que se edificaron dos plantas y cuenta con sótano y cuarto para el chofer. El costo: 16 millones 200 mil pesos.
Martínez Cázares, el senador plurinominal antilopezobradorista, ahora es un hombre sumamente próspero y, además de estos bienes, posee cuatro automóviles, cuatro de ellos comprados al contado.
En su declaración patrimonial correspondiente a 2018, el senador por Morena asegura tener tres camionetas y un auto. Uno de estos vehículos tiene un valor de casi un millón de pesos y otro supera el medio millón: una camioneta Ford Expedition 2018, por la cual pagó 825 mil 900 pesos (de contado), una Toyota Sienna 2015, con un valor de 686 mil 200 pesos; una camioneta Ford Escape 2018, con un costo de 330 mil pesos y, finalmente, un automóvil marca Jetta 2001, por el cual pagó, en noviembre de 2010, casi 300 mil pesos.
Después de su salida del PAN, en medio de acusaciones de inepto e incompetente (pese a que le autorizó disponer de 600 millones de pesos para la operación electoral), Martínez Cázares comenzó a litigar en un despacho llamado FGZ Consultores, ubicado precisamente en la calle de Londres 345, en Coyoacán. De ahí se dirigía caminando a la calle de Berlín 245, donde se entrevistaba con sus amigos Ricardo Rojo (dueño de Expertaria) y Fernando García Ramírez (ex subdirector de Letras Libres y columnista de El Financiero) para supervisar, bajo el patrocinio de su compadre Coppel, cómo iba marchando la operación antiAMLO.
El político incompetente
Martínez Cázares ⎼señalado como uno de los principales operadores del fraude electoral en 2006⎼ suele durar muy poco tiempo en sus cargos. Sólo estuvo diez meses como secretario de la Función Pública con Felipe Calderón, año y medio como presidente del PAN y menos de medio año (169 días) como director del IMSS. De hecho, en los 76 años que tiene la dependencia, Germán Martínez se ha convertido en el director general más efímero de su historia.
“Germán es, y siempre será, un panista de clóset. Como Anaya no le hizo caso, alguien tuvo la puntada de presentárselo, en 2018, a López Obrador”, nos dice una fuente que conoce desde hace muchos años a Martínez Cázares, pero que no consintió dar su nombre por temor a las represalias.