Dueños de edificios arriesgan a inquilinos y rentan azoteas hasta por 20 mil pesos

De acuerdo con las estimaciones de la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU), los montos de los contratos para espectaculares dependen de la zona, los más cotizados son Viaducto, Insurgentes y Calzada de Tlalpan.

Regeneración, 3 de octubre de 2017.- En la Ciudad de México, al menos 300 dueños de edificios han aceptado la instalación de espectaculares en sus azoteas, por contratos que ascienden entre los 8 mil y 20 mil pesos mensuales.

Los moradores viven preocupados por el riesgo que representan los anuncios publicitarios que podrían colapsar con algún sismo, lluvia o vientos con rachas fuertes que azoten la capital del país.

Aunque mes con mes los dueños se embolsan entre 8 y 20 mil pesos por la renta de la azotea para publicidad, los inquilinos no ven beneficios de esto. No hay mantenimiento en los edificios y los precios de rentas tampoco disminuyen.

José Manuel Hernández, dijo en entrevista con Excélsior que “al inicio ni sabíamos de los riesgos de tener un espectacular, pero nos fuimos enterando de la situación y más con el edificio que se cayó en Viaducto por el temblor, a nosotros no nos dicen nada, se arreglan el dueño con la empresa, pero sí nos preocupa que esté un espectacular en la azotea, porque con el peso en un temblor o aironazo se puede caer”. José es habitante del edificio en Campeche 192, en la Colonia Roma Sur.

De acuerdo con las estimaciones de la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU), los montos de los contratos para espectaculares dependen de la zona.

Los más cotizados son en corredores viales como Viaducto, Insurgentes y Calzada de Tlalpan están dentro de los más cotizados.

La FRRPU informó que, en la capital, al menos existen 8 mil anuncios espectaculares, de los cuales al menos 300 están instalados sobre azoteas de edificios como el de Viaducto 106, que colapsó con el sismo del 19 de septiembre.   

A la hora de construir los edificios, no se considera la carga extra de un espectacular que puede alcanzar hasta 20 toneladas, situación que los convierte en un riesgo para los habitantes.

Por ello los edificios se hunden o se pierde verticalidad, dijo a Excélsior Óscar González Cuevas, coordinador del Posgrado en Ingeniería Estructural de la Universidad Autónoma Metropolitana.

Asimismo, dijo que el espectacular induce “fuerzas de volteo” con los temblores o ráfagas de viento y el inmueble se levanta de un lado y se hunde del otro.

“El edificio tiene más peso y, si la cimentación no se diseñó para resistir esa carga adicional, pueden surgir hundimientos, puede desplomarse en el sentido que pierden la verticalidad”, dijo.

De acuerdo con la Ley de Publicidad Exterior, publicada en 2010, los edificios tienen prohibido colocar espectaculares y antenas en sus azoteas, sólo se permite en estructuras autosoportables.

La Ley dice: “Quedan prohibidos los anuncios de propaganda comercial e institucional instalados en las azoteas de las edificaciones”.

No obstante, dijo Jorge Negrete, presidente de la FRRPU, hay anuncios más viejos que la ley y aunque el gobierno implementó un programa de reordenamiento, después de siete años no se ha terminado y no se para cuando finalice.

El 19 de septiembre, el edificio ubicado en Viaducto y Torreón, en la Colonia Piedad Narvarte, colapsó. En la azotea se encontraba un anuncio de la empresa GiM Publicidad Exterior, de unos diez metros de altura.

Luego del colapso a causa del sismo de 7.1 grados, una grúa apoyó en la remoción de la estructura publicitaria para poder continuar con las labores de rescate que lograron la recuperación de 11 cuerpos y 6 personas con vida.

 

 

 

Con información de Excélsior