Monsanto y sus agrotóxicos; el costo humano

Fotografías de Pablo Ernesto Piovano

12-07-2014, Alicia Baja- Colonia Aurora, province of Misiones Lucas Techeira is three years old and he was born with ichthyosis, a skin disorder that causes the skin to be dry and cracked. He is locally known as the crystal boy. His father Arnoldo left his job at the tobacco fields when his son was born. 32-year-old Rosana Gaspar, Lucas’s mother, says that she always manipulated glyphosate at home to use in her vegetable garden.
Lucas Techeira tiene tres años y nació con ictiosis, un desorden de la piel que la vuelve seca y agrietada. Su madre, Rosana Gaspar, dijo que manipulaba glifosato, un herbicida, en su jardín vegetal.

Regeneración, 20 de enero de 2016.- El uso de glifosato como pesticida en Argentina ha dejado a su paso alrededor de 13.4 millones de personas afectadas.

El glifosato es el principal componente herbicida del mundo y ha sido clasificado por la Organización Mundial de la Salud como probable cancerígeno para el ser humano. Se trata del principal componente del herbicida desarrollado por Monsanto: Roundup uno de los productos de mayores ventas para la compañía.

En el año 2012, 370 millones de litro de agrotóxicos fueron esparcidos sobre cerca de 1 millón de hectáreas, lo que representa el 60% del área de cultivo del territorio Argentino. Esto significa que en una década los casos de cáncer en infantes aumentaran tres veces más de lo normal y las malformaciones en bebés aumentaran un 400%. Hasta ahora, a pesar de las quejas formales que se han presentado al respecto del uso de los agrotóxicos aún se ha sistematizado ninguna información oficial.

En 1996, el gobierno aprobó la comercialización del frijol de soya transgénico y el uso del herbicida glifosato. Desde entonces, las tierras fértiles de cultivo se volvieron un campo de experimentación donde decenas de estudios científicos y pruebas médicas pueden comprobar el desastre sanitario.

Argentina aprobó el uso de OGM (organismos genéticamente modificados) sin realizar sus propias estudios, tomando como evidencia científica trabajos de investigación publicados por la propia compañía Monsanto. El cultivo de la soya transgénica fue autorizado e sólo tres meses gracias a un procedimiento administrativo.

El fotógrafo Pablo Piovano ha realizado un trabajo de documentación al respecto de los agrotóxicos en Argentina. “He realizado este trabajo llevado por mi amor y como un tributo a la Madre Naturaleza. Es una visión crítica del mal uso del conocimiento y la tecnología que a través del tiempo ha arrastrado a la civilización hasta hacerla perder su memoria sobre su nuestra relación con la naturaleza.”

Los gemelos Aldo y Maximiliano Barrios. Sufren de microencefalia, asociada con el uso de sustancias neurotóxicas en la agricultura transgénica.
Los gemelos Aldo y Maximiliano Barrios. Sufren de microencefalia, asociada con el uso de sustancias neurotóxicas en la agricultura transgénica.

“Las empresas de medios más importantes han escondido de manera perversa los números escandalosos de la población afectada, y se han vuelto cómplices de responsables directos como Monsanto, políticos, e importantes terratenientes”, comentó Pablo para la publicación BurnMagazine.

“Por estas razones decidí trabajar para evidenciar esta situación, pasando largos días a solas, viajando alrededor de 6,000 kilómetros en mi coche de hace veinte años, y con mi cámara, como contribución para detener este problema.”

El costo humano – por Pablo Ernesto Piovano from Pablo Ernesto Piovano on Vimeo.