Murió Dario Fo, dramaturgo y premio nobel de literatura

El escritor italiano, murió a los 90 años, fue conocido por sus textos irreverentes y su irreverencia política, acusando de ‘falsa democracia’ la política italiana.

 

Darío Fo.

Regeneración, 13 de octubre de 2016.- El premio nobel de literatura en 1997, Dario Fo, murió hoy, luego de que ingresara al hospital por padecer insuficiencia respiratoria.

En marzo pasado había cumplido 90 años sin perder la pasión por el teatro, la pintura, la escritura y el activismo que lo llevó a convertirse en un referente de la izquierda italiana

Autor de títulos como Muerte Accidental de un Anarquista y Aquí no Paga Nadie, fue unos de los intelectuales más comprometidos de la izquierda italiana; defendiendo siempre el papel de la sátira como el arma más eficaz contra el poder y la risa como la liberación del hombre.

Pese a los achaques propios de la vejez, el también actor siguió atacando con la misma fuerza a los poderes de la casta política y la iglesia.

Fo, nacido el 24 de marzo de 1926, en Sangiano, estudió en la Academia de Bellas Artes de Milán, pero enseguida orientó su vida al teatro, entrando a trabajar en la RAI –la televisión pública italiana—como autor y actor de textos satíricos.

Desde 1968, en compañía de Franca Rame –su compañera de vida y de carrera artística—y de Massimo de Vita, Vittorio Franceschi y Nanni Ricordi, fundó el grupo teatral Nueva Scena, con la intención de recuperar los valores sociales del teatro.

Durante su larga trayectoria publicó más de 100 obras teatrales que él mismo solía dirigir e interpretar, y numerosos libros. Sus obras más destacadas arremeten contra la burguesía, la Iglesia, el capitalismo y la mafia, el establishment y el poder político. Sus escritos están llenos de burla, de crítica y de sátira hacia un sistema imperfecto y podrido que anula las voluntades ciudadanas.

Fue un juglar, un maestro de la sátira. Mistero Buffo fue su obra maestra, donde interpretaba él solo multitud de personajes y mostraba unas grandes dotes de mímica.

Desencantado de la política, el autor consideraba que “todo es un juego. El juego de la falsa democracia. La gente de Berlusconi sigue ahí. Y él se ha salvado. Matteo Renzi lo ha salvado de la cárcel, de algunos procesos muy peligrosos para Berlusconi porque tenían que ver con la sexualidad, con el escándalo que eso conlleva para sus bases católicas. Hoy Italia se ha convertido en una especie de polenta, todo ha sido mezclado, no hay punto de partida ni de llegada, no hay dignidad”.

Asqueado de la clase política en general, en los últimos años de su vida apoyó el Movimiento Cinco Estrellas, fundado por su amigo Beppe Grillo.

Le sobreviven infinidad de textos y pinturas, es uno de los hombres más importantes de la historia del teatro y la literatura italiana.

Vía el País, El Dario y La Marea.