Semefos del país están desbordados ante ola de violencia

Además de estar rebasados, los Semefos del país también están viejos. En Chiapas, por ejemplo, fueron construidos hace 20 años.

Regeneración, 7 de enero de 2018.- El Servicio Médico Forense (Semefo) del país está rebasado ante los índices de violencia.

Los Semefos de Guerrero son los más saturados. El de Acapulco tiene una capacidad para 150 cuerpos, pero hay 297, mientras que el de Chilpancingo puede albergar 250 pero hay 650 y en Iguala, donde hay cabida para sólo 30 cuerpos, hay 78.

En el estado de Veracruz hay dos Semefos, uno en Xalapa y otro en Veracruz, que también son insuficientes para atender la demanda de cuerpos encontrados en fosas clandestinas y por asesinatos.

Por su parte, en San Luis Potosí hay cinco, pero tres están a su máxima capacidad, mientras que en Oaxaca hay un refrigerados para 22 cuerpos completamente lleno.

En Sinaloa, por ejemplo, desde diciembre de 2016, el Semefo de Culiacán funciona parcialmente.

Además de estar rebasados, los Semefos del país también están viejos. En Chiapas, por ejemplo, fueron construidos hace 20 años y en Baja California Sur hay dos de cuatro que iniciaron en la década de los 80.

En Durango, entre 2011 y 2012 fueron encontrados 351 cuerpos y al no tener capacidad en el Semefo, la fiscalía tuvo que rentar refrigeradores para resguardarlos.

En Fresnillo, Zacatecas, tuvieron que practicar las necropsias en el panteón municipal por la falta de instalaciones.

Mientras, en estados como Michoacán, Aguascalientes, Tabasco, Tamaulipas, Puebla, Tlaxcala y Chihuahua las autoridades aseguran no tener problemas de saturación.

Pero, en las regiones alejadas de los estados de Sonora, Hidalgo, Coahuila, Oaxaca, San Luis Potosí, Quintana Roo y Sinaloa, los Semefos tienen que realizar convenios con funerarias.

En estados como Michoacán, Tabasco, Coahuila o Puebla, se tiene establecido que luego de 72 horas de no haber sido reclamado el cuerpo, éste puede ser enviado a la fosa común, pero, en otras entidades se mantienen cuerpos desde 2012. Según la Ley de Salud del país, no existe plazo cuando se trata de muertes violentas.

En Jalisco, por ejemplo, los cuerpos pueden durar hasta seis meses, mientras que en Morelos pueden tardar hasta dos meses, en Aguascalientes 3, en Michoacán entre 3 y 4 meses, en Yucatán y Baja California solo duran 30 días y en Oaxaca no hay plazo.

 

 

Con información de El Universal