Bardot falleció dejando su imagen como símbolo sexual, su activismo por los animales y sus condenas por incentivar al odio
Regeneración, 29 de diciembre de 2025– Brigitte Bardot, una actriz y cantante que se transformó en un ícono de la cultura de Francia, y fue controvertida por sus posturas de extrema derecha, murió este domingo a los 91 años en su hogar ubicado en La Madrague, Saint-Tropez.

Legado
Su muerte ha provocado un intenso debate sobre la paradoja de su legado:
Un ícono de la liberación sexual y al mismo tiempo una figura polémica por sus posturas políticas y sociales.
La actriz se retiró del cine en 1973 después de haber trabajado en exitosas películas como «Y Dios creó a la mujer» (1956), «La verdad» (1960) y «El desprecio» (1963).

Luego, se enfocó en el activismo por la protección de los animales durante los últimos años de su existencia.
Sus imágenes denunciando la caza de focas en Canadá en los años setenta son todavía célebres, y hasta sus últimos días continuó luchando contra la caza de montería en Francia.

Controversia
No obstante, su figura pública también estuvo marcada por la controversia.
Entre 1997 y 2008, Bardot fue multada en seis ocasiones por incitación al odio, sobre todo por comentarios en contra de la comunidad musulmana en Francia.
En uno de los casos, un tribunal en París le impuso una multa de 15.000 euros.
Sucedió por declarar que los musulmanes eran “población que nos está destruyendo, destruyendo nuestro país al imponer sus actos”.

Extrema derecha
Su afinidad con la extrema derecha también atrajo críticas.
Bardot contrajo matrimonio en 1992 con Bernard d’Ormale, exasesor del partido Frente Nacional.
Expresó su apoyo públicamente a sus líderes Jean-Marie Le Pen y Marine Le Pen, a quienes llegó a describir como “la Juana de Arco del siglo XXI”.
Además, sus comentarios despectivos hacia la comunidad LGBTQ+ y sus críticas a las acusaciones del movimiento #MeToo en 2014 generaron controversias a lo largo de los años.

Críticas al feminimo
En esa ocasión, ella comentó que algunas de las denuncias contra hombres eran “hipócritas”.
Usó el argumento de que muchas actrices “seducen a los productores para obtener un papel”.
Pese a su fama mundial como símbolo sexual, la artista continuó creando polémica incluso años después de su salida del cine.
Su obra más reciente, Mon BBcedaire (Mi alfabeto BB), lanzada semanas antes de su fallecimiento, incluye críticas a la Francia de hoy.

Anti LGBT
Asimismo, contiene comentarios despectivos sobre homosexuales y personas transgénero.
Bardot deja un legado polarizado: musa de la liberación sexual y celebridad de la música y el cine.
Sin embargo, también es una figura controvertida por sus posiciones racistas y afinidad con la
ultraderecha.














