«Me encanta Dios» poema con que Beatriz Gutiérrez Müller despide el año

Beatriz Gutiérrez comparte en voz alta poema de Jaime Sabines. «…que Dios bendiga a Dios», dice el texto. Deseó felicidad y sentimientos elevados

Me encanta Dios, leído por Beatriz Gutiérrez

Regeneración, 30 de diciembre de 2021. Beatriz Gutiérrez Müller publicó un video donde lee en voz alta el poema «A mi me encanta Dios» de Jaime Sabines, para en ese contexto desear felicidad y pensamientos y sentimientos elevados.

Y es que publicó en Facebook: «Comparto con ustedes esta lectura en voz alta, de un poema de Jaime Sabines».

Además deseó que «el penúltimo día de este 2021 sea muy feliz para ti y tu familia, teniendo en la cabeza y en el corazón pensamientos y sentimientos trascendentes».

Junto a lo anterior rubricó su publicación con los hashtags relacionados a #EstrategiaNacionalDeLectura y #Lee ade mas de #poetasmexicanos.

Diciembre

Asimismo Beatriz Gutiérrez Müller recordó que diciembre es el mes de dios, porque se celebra en la iglesia cristiana y en otras iglesias recuerdan a Yahvé, dijo

«Y desde la antigua roma, a los dioses».

Por eso he escogido este poema de Jaime Sabines que se llama «A mi me encanta Dios», precisó.

Con mucho cariño para ustedes, expresó Beatriz y procedió a la lectura:

El texto

Me encanta Dios. Es un viejo magnífico que no se toma en serio. A él le gusta jugar y juega, y a veces se le pasa la mano y nos rompe una pierna o nos aplasta definitivamente. Pero esto sucede porque es un poco cegatón y bastante torpe con las manos.

Nos ha enviado a algunos tipos excepcionales como Buda, o Cristo, o Mahoma, o mi tía Chofi, para que nos digan que nos portemos bien. Pero esto a él no le preocupa mucho: nos conoce. Sabe que el pez grande se traga al chico, que la lagartija grande se traga a la pequeña, que el hombre se traga al hombre. Y por eso inventó la muerte: para que la vida -no tú ni yo- la vida, sea para siempre.

Ahora los científicos salen con su teoría del Big Bang… Pero ¿qué importa si el universo se expande interminablemente o se contrae? Esto es asunto sólo para agencias de viajes.

A mí me encanta Dios. Ha puesto orden en las galaxias y distribuye bien el tránsito en el camino de las hormigas. Y es tan juguetón y travieso que el otro día descubrí que ha hecho -frente al ataque de los antibióticos- ¡bacterias mutantes!

Viejo sabio o niño explorador, cuando deja de jugar con sus soldaditos de plomo y de carne y hueso, hace campos de flores o pinta el cielo de manera increíble.

Mueve una mano y hace el mar, y mueve la otra y hace el bosque. Y cuando pasa por encima de nosotros, quedan las nubes, pedazos de su aliento.

Dicen que a veces se enfurece y hace terremotos, y manda tormentas, caudales de fuego, vientos desatados, aguas alevosas, castigos y desastres. Pero esto es mentira. Es la tierra que cambia -y se agita y crece- cuando Dios se aleja.

Dios siempre está de buen humor. Por eso es el preferido de mis padres, el escogido de mis hijos, el más cercano de mis hermanos, la mujer más amada, el perrito y la pulga, la piedra más antigua, el pétalo más tierno, el aroma más dulce, la noche insondable, el borboteo de luz, el manantial que soy.

A mí me gusta, a mí me encanta Dios. Que Dios bendiga a Dios.