Lodos tóxicos del nuevo aeropuerto contaminarán agua de Texcoco: UACh

El material extraído de las obras contienen boro, cloro, sodio y carbonato y han sido depositados en los socavones de las minas de los poblados Tequesquinahuac, San Luis Huexotla y Tlaminca, ésta última reserva natural protegida de Texcoco.

Regeneración, 20 de abril de 2018.- La inviabilidad del proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM) quedó demostrado con otra evidencia: lodos tóxicos que contienen boro, cloro, sodio y carbonato han sido depositados en los socavones de las minas de los poblados Tequesquinahuac, San Luis Huexotla y Tlaminca, ésta última reserva natural protegida causando contaminación en los mantos acuíferos de Texcoco.

José Espino Espinoza, investigador de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh) denunció ante los medios de comunicación que los lodos extraídos en la obra del nuevo aeropuerto comienzan a causar efectos severos por la contaminación en un área de alta recarga del líquido.

Detalló que los efectos más graves se sentirán en menos de 10 años, pues los pozos de agua potable van a empezar a extraer agua salina o con algunos de los contaminantes de los lodos, pues se depositan en los hoyos que se escarbaron en las minas a 50 metros y los mantos acuíferos están entre 150 y 180 metros de profundidad.

“Para nosotros ese es el problema que pueda afectar a todo el acuífero de Texcoco y a todas las comunidades porque la mayoría de las 59 comunidades que tiene Texcoco obtenemos agua para los sistemas de agua potable de ese acuífero.

“En algunas de las comunidades ya están haciendo perforaciones a 280 y 300 metros porque sus sistemas de agua potable ya no los abastecen. Consumir esta agua necesariamente va impactar en la salud, si decimos por ejemplo que el boro produce esterilidad pues sus efectos serán esos”, declaró.

Afirmó que los estudios realizados por la UACh indican que ese material es más tóxico que los azolves y aguas negras contenidos en los canales profundos de drenaje.

Afirmó que la única alternativa es que se saquen esos lodos de los socavones de Tequesquinahuac, San Luis Huexotla y Tlaminca y se llevan a otro lugar, en donde se les apliquen las normas federales, estatales y municipales adecuadas.