Paralizan protestas Hong Kong con desafío a ley antimáscaras

Protestas de este sábado se vieron avivadas por la aprobación el viernes de una ley que prohíbe el uso de máscaras durante las manifestaciones

Regeneración, 6 de octubre del 2019. Una caótica madrugada vivió este sábado Hong Kong, que prácticamente se paralizó tras el desafío a ley antimáscaras por parte de manifestantes.

Estaciones de metro selladas, comercios y bancos de propiedad china destrozados y enfrentamientos con la Policía fue el resultado de los enfrentamientos.

De acuerdo con la agencia EFE, más de un millar de personas retaron con sus máscaras la decisión de la Jefa del Ejecutivo, Carrie Lam, de invocar una ordenanza de la época británica para aprobar su ley.

Cierre de estaciones
De acuerdo a esta ordenanza se busca identificar más fácilmente a los manifestantes violentos para sofocar las protestas que se suceden en la ciudad desde hace cuatro meses.
Pero nada más lejos de la realidad: este sábado la ciudad amaneció con el cierre generalizado de estaciones de metro, tiendas y bancos tras una noche marcada por el vandalismo.
Muchos manifestantes respondieron a la controvertida legislación aprobada el viernes portando máscaras –prohibidas desde la medianoche– y coreando consignas.

Policía dispara contra un joven
Sin embargo, los más radicales optaron por vandalizar mobiliario urbano, prender hogueras, lanzar cócteles molotov y, en algunos casos, quemar banderas de China.

Tiendas y bancos vinculados a China fueron objetivo de los manifestantes más violentos, como la fachada de una sucursal del Banco de China en Tsuen Wan.

Destacó un incidente ocurrido en el barrio de Tuen Mun, donde un grupo de manifestantes atacó a un policía fuera de servicio que se encontraba en su vehículo.

El agente respondió con un disparo que alcanzó a un adolescente de 14 años en un muslo.

Bajo riesgo de cárcel
Los manifestantes tomaron las calles con sus máscaras, pese al riesgo de ser sentenciados con penas de hasta un año de cárcel y a ser sentenciados con una multa de del equivalente a 3 mil 188 dólares.
Los manifestantes coreaban consignas como “Usar máscara no es delito, la resistencia es razonable” y “Pueblo de Hong Kong, ¡resistir!”, “No voy a dejar de manifestarme por esta prohibición.
“En cualquier caso, la Policía está ya arrestando arbitrariamente a mucha gente”, dijo un manifestante enmascarado que se identificó como Man.

Cuatro meses de protestas
“Si vas a una asamblea ilegal, te arriesgas a penas de prisión de cinco años. Un año más o menos… no es para tanto”.

“Pero siendo sincero, no se trata de las consecuencias de tal o cuál acción. Saldría a la calle incluso si el riesgo fuera prisión de por vida. Todo está mal con este Gobierno”, añadió.

Hacia las 17:00 hora local del sábado (11:00 GMT), la mayoría de los manifestantes que habían llegado al distrito de Central se habían ya dispersado.

Sin embargo, algunos internautas pidieron prepararse para una gran marcha el domingo.

Entretanto, la Jefa del Ejecutivo local, Carrie Lam, compareció este sábado solemne en un video de cinco minutos para arremeter contra los “actos extremos, impactantes e indignantes” de los manifestantes.

Asimismo, urgió a los hongkoneses a que los condenen y se distancien de ellos.

Lam, flanqueada por 14 de sus ministros, acusó a los manifestantes de provocar una “destrucción sin precedentes” en la ciudad financiera.

“Los actos extremos causaron que Hong Kong viviera ayer una noche muy oscura. La ciudad está medio paralizada hoy”, puntualizó Lam, y agregó que los hongkoneses están “preocupados y temerosos”.

Las protestas en Hong Kong, que se convirtieron en masivas en junio a raíz de una polémica propuesta de ley de extradición, se han sucedido durante casi cuatro meses.

Luego mutaron hasta convertirse en un movimiento que busca una mejora de los mecanismos democráticos que la rigen y una oposición al autoritarismo de Beijing.

No obstante, algunos manifestantes han optado por tácticas más radicales que la protesta pacífica y los enfrentamientos violentos con la Policía son habituales.

La última de oleada de enfrentamientos se produjo el pasado 1 de octubre, día en que la China comunista celebraba el septuagésimo aniversario de su fundación.

Esta jornada tuvo un saldo de 269 personas arrestadas en Hong Kong.